El ‘macrocasting’ de Desigual: 200 personas compiten por 20 puestos de vendedor

Diez turnos de veinte personas cada veinte minutos. Un año de experiencia, inglés perfecto y ganas de vender. Este es el perfil que busca uno de los principales grupos de distribución de moda en España, Desigual, para cubrir una veintena de puestos de trabajo en su red de tiendas de Barcelona. La compañía celebrará durante la mañana de hoy su primer Job Market, una jornada de reclutamiento de personal que recuerda a las que llevan a cabo algunas de las principales empresas estadounidenses.

Si Abercrombie&Fitch hace sus entrevistas de trabajo en probadores con música a todo volumen y Apple selecciona a su personal poniendo pruebas tan curiosas como animar a sus futuros empleados a inventarse productos tecnológicos que aún no estén en el mercado, Desigual ha decidido reunir a 200 personas en su sede de Barcelona para fichar a los que más afinidad tienen con la marca.

El evento constará de cuatro fases, que se repetirán en diez turnos de veinte personas. La primera prueba a la que se enfrentarán los aspirantes a formar parte de la empresa fundada por Thomas Meyer será la presentación de los valores de la marca y una breve explicación de por qué Desigual quiere que formen parte de su equipo.

El siguiente paso será una prueba práctica, en la que los candidatos al puesto simularán una venta. Entre los requisitos que exige Desigual para ocupar uno de estos veinte puestos es tener un año de experiencia y hablar algún idioma. Acto seguido, el aspirante se enfrentará a una entrevista personal.

Antes de acabar con la entrevista, Desigual enseñará a los futuros empleados las instalaciones con las que Desigual cuenta en el paseo Mare Nostrum, a los pies del hotel W.

Más cambios en Desigual

Desigual lleva a cabo el evento en el marco de una revisión de su modelo de negocio. El producto, su red de tiendas y un nuevo equipo directivo serán los ejes en los que se desarrollará el cambio de la empresa, que desde 2014 tiene en su capital al fondo galo Eurazeo, que compró un 10% de la empresa por 285 millones de euros.

El pasado año, Manel Jadraque, hasta ahora consejero delegado de Desigual, explicó que el producto viraría en los siguientes años, intentando conseguir unas colecciones más mainstream y algo más comerciales. La compañía continúa decidida a cambiar su producto tras la salida de su primer ejecutivo, rebajando el colorido y la carga gráfica de sus colecciones.

Todos los cambios que realizará la compañía serán para retomar el ritmo de crecimiento que había registrado hasta la primera mitad de 2015. El grupo catalán venía de registrar crecimientos imparables en su cifra de negocio y en su beneficio.

Uno de los más impactantes fue el del primer semestre del pasado año, cuando la compañía elevó su resultado neto hasta 66,4 millones de euros, un 47,9% más. Una cifra que lejos queda de las obtenidas por el grupo en el primer semestre de 2015, con un resultado bruto de explotación (ebitda) de 92,1, un 26% menos que en el mismo periodo del año anterior.

La cifra de negocio de Desigual también se resintió en los seis primeros meses del año. La compañía registró en la primera mitad de 2014 una cifra de negocio de 452,9 millones de euros, un 23,1% más que en el primer semestre de 2013. En los seis primeros meses de 2015, la evolución fue plana, registrando una facturación de 451,9 millones de euros.