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Enric Carrer: “De nada sirve utilizar fibras recicladas si no se reduce la producción”

El director de Institut d'Investigació Tèxtil i Cooperació Industrial de Terrassa (Intertex) echa en falta más talento investigador para abordar la transformación en la que está inmersa el sector.

Enric Carrer: “De nada sirve utilizar fibras recicladas si no se reduce la producción”
Enric Carrer: “De nada sirve utilizar fibras recicladas si no se reduce la producción”
“La industria textil tiene una imagen negativa, pero a quien le guste la tecnología y la ingeniería debe saber que el textil es el sector con mayor utilización intensiva de tecnología”.

C. Sanchis

27 jul 2023 - 05:00

Un sector tecnológico y atractivo que necesita transformarse. Enric Carrera, director del Institut d’Investigació Tèxtil i Cooperació Industrial de Terrassa (Intertex), defiende que la industria de la moda es una excelente salida para los jóvenes que disfruten con la tecnología, pero que ahora no ven atractivo en el sector. Captar talento es más necesario que nunca ante el punto de inflexión en el que se encuentra el sector que, según Carrera, necesita hacer un profundo replanteamiento. “Hasta que no nos planteemos un nuevo modelo de negocio para el sector de la moda estaremos dando vueltas sobre el mismo eje”, asegura.

 

 

Pregunta: ¿Cuáles considera que son los principales retos de la investigación textil en España?

 

Respuesta: En estos momentos, todo está muy condicionado por la Estrategia europea de Textiles Sostenibles y Circulares, que va a comportar un cambio radical mucho mayor de lo que la gente piensa. En consecuencia, la sostenibilidad es el gran reto que tenemos y lo que nos pide la industria. Desde la fabricación de fibras nuevas, básicamente naturales o basadas en fibras naturales modificadas, hasta el modelo de negocio. Sé que es complejo, pero hasta que no nos planteemos un nuevo modelo de negocio para el sector de la moda estaremos dando vueltas sobre el mismo eje. De nada sirve utilizar fibras recicladas, si nadie se plantea reducir la producción de prendas. Otro reto importante es medir la durabilidad de la prenda, es difícil marcar unos estándares claros sobre cómo hacerlo y la investigación gira entorno a estas cuestiones.

 

P.: ¿Falta inversión en investigación?

 

R.: Sí, es un desastre. Durante muchos años, ha sido muy difícil poder solicitar en convocatorias públicas ayudas a la investigación al sector textil porque todo iba destinado a otros sectores. El textil se ha considerado desde siempre poco importante a escala estratégica.

 

P.: ¿Y talento? ¿Cómo se hace el sector atractivo para las nuevas generaciones?

 

R.: La industria textil tiene una imagen negativa, pero a quien le guste la tecnología y la ingeniería debe saber que el textil es el sector con mayor utilización intensiva de tecnología, porque las fibras son materiales, la pintura es química, la distribución es logística y distribución y la hilatura es mecánica y electrónica. Los tejidos técnicos pueden ser inteligentes y el sector aprovecha los desarrollos científicos y tecnológicos. Recientemente hay gran demanda de tecnólogos textiles, que se forman entre la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC) y en la Universidad de Valencia (UV), pero continúan siendo insuficientes y es una lástima porque esta falta va a dificultar el desarrollo. También faltan especialistas del sector, como anudadores o pasadores de hilo en los telares, por ejemplo. Los que hay ahora se jubilan y los jóvenes prefieren trabajar con bata blanca y aire acondicionado, como es normal.

 

 

 

 

 

 

P.: ¿Cuál es la relación de la academia con los grandes grupos del sector? ¿Y con la industria?

 

R.: Los grandes grupos cuentan con técnicos muy buenos y colaborar con entidades como la nuestra depende de cada política de la empresa. Aún así, es cierto que están preocupados y se alinean en la dirección de la Unión Europea, por lo que estamos haciendo estudios e investigaciones relacionadas con la sostenibilidad con algunos operadores y tenemos buena relación con ellos. Con la industria también tenemos muy buena relación, formamos parte de Texfor y, además de investigación, hacemos estudios para un centenar de empresas que pasan por medir la rotura de un hilo o ver cuál es la forma de tintura que da un mejor resultado.

 

P.: ¿Cuáles son las principales líneas de investigación?

 

R.: Actualmente trabajamos en depuración de aguas residuales de la industria textil, porque la industria utiliza el agua como medio de transporte de productos químicos. Otra línea de investigación son los procesos de tintura, cómo teñir con colorantes naturales y consumiendo menos agua. También estudiamos sobre productos que se añaden al textil para darle propiedades de uso, como antimanchas. Estudiamos los polímeros textiles y desarrollos de nuevas fibras (cáñamo, yute, residuos agrícolas), así como las microfibras y nanofibras para aplicaciones médicas. Una de las líneas de investigación más potente también es la trazabilidad, la gestión de residuos y pasaporte digital.

 

P.: La legislación sostenible exige mucha innovación. ¿España puede ser puntera en investigación y desarrollo?

 

R.: España tiene una fortaleza muy importante, con gran experiencia en reciclado mecánico, en Alcoi (Alicante) y Olot (Girona). España puede producir 60.000 toneladas de hilados hechos con tecnología de reciclaje mecánico, situándose como el país con más capacidad, aunque continúa siendo insuficiente para hacer frente a la nueva normativa. Cabe tener en cuenta que la experiencia que tiene España es reciclando residuos preconsumo y ahora habrá que reciclar el posconsumo. España está muy bien situada y hemos de aprovechar esta oportunidad, pero será necesario ampliar la capacidad productiva.

 

 

P.: Grandes proyectos nacidos de la academia se han desarrollado fuera, como Piratex. ¿Por qué no en España?  

 

R.: La industria textil española no es una que se caracterice por gran investigación y desarrollo. Falta una mayor apuesta por la investigación y desarrollo que sólo se consigue en otras zonas en Europa. Falta investigación que se centre en textiles sanitarios, textiles inteligentes, ropa deportiva de altas prestaciones y sostenibilidad.

 

 

P.: ¿Está España preparada a escala tecnológica para abordar la transformación sostenible?

 

R.: Sí, tiene capacidad de adaptación, pero hacen falta inversiones, sobre todo en la recogida de ropa, clasificación y aprovechamiento de estos residuos. Se requieren grandísimas instalaciones: España recoge el 12% de los residuos utilizados, pero hasta alcanzar el 100% se necesita mucho más. Lo que también preocupa es la exigencia que se vaya a poner a los productos extranjeros, que ahora son las dos terceras partes del total. La respuesta institucional es que se dará el apoyo pertinente, pero no se sabe si el servicio de aduanas es capaz de gestionar todo esto.

 

P.: ¿Qué le pide al nuevo Gobierno?

 

R.: Que ante reto de la aplicación de la estrategia europea de residuos decida apostar debidamente por el sector textil y que otorgue el apoyo necesario a la industria, que lo va a necesitar.