Entorno

China recupera su imán como polo productivo textil con la devaluación del yuan

Modaes

2 sep 2015 - 04:57

El mapa del aprovisionamiento global está a las puertas de dar otro viraje. La devaluación del yuan dará oxígeno a los márgenes de las grandes compañías de retail que han mantenido parte de su aprovisionamiento en China. Casi diez años después del traslado de la producción de China a otros países del sudeste asiático en busca de costes más bajos, el gigante asiático vuelve a despertar atractivo ante los gigantes del sector.

 

A mediados de agosto, el Banco Popular de China hizo saltar todas las alarmas tras llevar a cabo tres devaluaciones de su divisa en apenas 72 horas. En tres días, el yuan perdió un 4,6% de su valor con respecto al dólar marcando su mayor descenso en dos décadas. El Gobierno de Pekín defendió el pasado sábado la reforma, que calificó de “ajuste normal” para negar con rotundidad que fuera el inicio de una ronda de devaluaciones monetarias competitivas entre gobiernos para aupar las exportaciones.

 

No obstante, la devaluación del yuan ha agitado parte del mercado de divisas y ha tenido especial incidencia en las monedas de economías emergentes. Es el caso de Rusia, donde la pérdida de valor de la divisa china agravó aún más la depreciación del rublo sobre el dólar en los últimos meses, y Turquía. La situación en China tiene un impacto negativo sobre Brasil, otro de los Bric. En lo que va de año, el real brasileño acumula una devaluación de en torno al 30% y del 60% en los últimos doce meses.

 

La depreciación del yuan encarecerá sin duda las importaciones del país, pero contribuirá a abaratar sus exportaciones. De hecho, la depreciación de la divisa local se produjo pocos días después de conocerse que el comercio exterior del país se contrajo en julio un 8,8% interanual. En el séptimo mes del año, las exportaciones e importaciones chinas se desplomaron, marcando retrocesos del 8,9% y del 8,6%, respectivamente.

 

Por otro lado, la actividad manufacturera en China entró en contracción en agosto, según el Índice Gerente de Compras (PMI, en sus siglas en inglés) industrial. El índice se situó en agosto en 49,7 puntos, por debajo del nivel de cincuenta que separa la expansión de la contracción, según datos de la Oficina Nacional de Estadísticas china. Se trata de la cifra más baja desde agosto de 2012.

 

El Producto Interior Bruto (PIB) del gigante asiático creció en el segundo trimestre del año un 7% interanual, el mismo porcentaje que en el trimestre anterior. No obstante, es el menor ritmo de crecimiento en un trimestre desde 2009.

 

Se estima que la devaluación del yuan y la desaceleración en la producción tengan también un impacto sobre los salarios. De hecho, la subida de los costes laborales en China en los últimos años fue uno de los motivos por el cual muchos de los grandes operadores mundiales de la distribución de moda abandonaron el país en busca de producción low cost en otras regiones del sudeste asiático.

 

No obstante, en los últimos años, países como Bangladesh, Camboya o Vietnam han logrado elevar sus salarios mínimos. Incluso Myanmar, que trata de acompañar su apertura democrática de una recuperación económica vinculada al textil, acaba de fijar por primera vez en su historia un sueldo mínimo en el país.

 

En la actualidad, los salarios mínimos se sitúan en 5.300 takas (50,15 euros) mensuales en Bangladesh, que continúa siendo el país de la región con la mano de obra más barata a pesar de haberlo incrementado un 77% en 2014. Sri Lanka también incrementó el sueldo el año pasado hasta 10.000 rupias mensuales (64,7 euros) al mes; Camboya lo elevó también a finales de 2014 hasta 128 dólares, mientras que Vietnam lo situó este año en 146 dólares mensuales. Myanmar lo fijó ayer en 67 dólares al mes. China, por su parte, situó en 2014 su salario mínimo en 174,6 euros.

 

Impacto sobre los gigantes de la distribución

 

En los últimos años, el mapa global del aprovisionamiento ha cambiado radicalmente. El encarecimiento de los costes productivos en China fomentó que las nuevas políticas de suministro de los grande operadores se diversificara y tomara en consideración muchos más focos, como el sudeste asiático para la producción low cost y en proximidad para las series cortas.

 

Inditex, Nike, Levi’s o H&M son algunas de las compañías que concentran gran parte de su producción en China. El grupo español de distribución tiene en el gigante asiático su mayor clúster productivo, con una red de 300 proveedores y 849 fábricas. En 2014, la compañía compró en el país un 10,7% más que en el año anterior.

 

La confección de las míticas prendas vaqueras de Levi’s se reparte entre 657 fábricas repartidas por todo el mundo. El gigante asiático alberga el 30% de todas las fábricas de la compañía en el mundo: 198, una cifra muy superior al conjunto de proveedores en cualquier otro continente. En el resto de Asia, Levi’s concentra 234 centros de producción, mientras que en Europa, la empresa cuenta con 97 fábricas; en Latinoamérica, con 53, y en África, con 24.

 

Otro grupo estadounidense, Nike, también tiene en China su mayor proveedor. La compañía trabaja con 180 centros de producción en el país. Allí, 229.732 trabajadores confeccionan el 42,8% de toda la ropa de Nike, el 37% de su calzado y el 36,7% de los productos de equipamiento. El resto de su producción se realiza en 512 fábricas de 41 países, y genera en total más de un millón de empleos en todo el mundo. Los trabajadores que confeccionan para Nike son, según la compañía, mayoritariamente mujeres, y tienen una edad media de 36 años.

 

H&M, por su parte, confía cerca de la mitad de su producción a fábricas situadas en China. El 43% de sus fábricas están ubicadas en esta región, donde trabaja con 374 proveedores que suman 840 factorías. Su segundo mayor foco de producción es el sudeste asiático. Países como Camboya o Vietnam concentran 552 fábricas que trabajan para H&M, una cifra ligeramente superior al número de centros de producción de la compañía en la región Emea (Europa, Medio Oriente y África).  En esta área, un total de 534 factorías confeccionan para la compañía.