Magda Pons-Quintana, tradición familiar para reivindicar el ‘made in Spain’

La primera generación lo crea y la segunda lo impulsa. Este ha sido el caso en Pons Quintana, que, bajo la dirección de Magda Pons-Quintana, hija del fundador, Santiago Pons Quintana, ha celebrado en 2023 su setenta aniversario. Junto con su hermano Santiago, Magda Pons-Quintana ha liderado la transformación de la imagen de la compañía, que bebe de la tradición industrial del calzado en Menorca, donde todavía conserva su fábrica.

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Pons Quintana inició su trayectoria en Alaior (Menorca) en 1953 especializada en calzado infantil. Santiago Pons Quintana (fallecido en 2020) se introdujo en el sector cuando comenzó a trabajar en la fábrica de su tío Pepe Quintana, pero en casa, por las noches, elaboraba calzado infantil junto a su futura esposa y lo vendían en una tienda de su pueblo, Alaior. Unos empresarios islandeses se fijaron en aquellos zapatitos y le hicieron un encargo que se convirtió en el origen de Pons Quintana. Sólo tres años después llegó otro gran encargo: El Corte Inglés se convirtió en cliente de la empresa e impulsó su negocio.

Empresa

Pons Quintana

Cargo

Consejera delegada

Tiempo en el sector

35 años

Año de nacimiento

1961

Lugar de nacimiento

Menorca

Pons Quintana comenzó con calzado infantil, pero poco después de su fundación dio el salto al calzado femenino, para terminar incorporando también al hombre a su oferta. El crecimiento hizo que la empresa requiriese más espacio y en 1968 se construyó la actual fábrica, incorporando una maquinaria más moderna para el montaje y fabricación de su producto. A partir de 1975, se iniciaron los primeros contactos comerciales con Europa y Pons Quintana comenzó a ganar carácter internacional.

La crisis industrial de finales de los setenta y principios de los ochenta forzó a la empresa a dejar atrás su calzado tradicional y a centrarse en el calzado femenino. Este momento coincidió con la incorporación a la gestión de la siguiente generación, manteniéndose al frente su fundador. Con la llegada de Magdalena y Santiago Pons-Quintana a la dirección de la compañía, se puso el acento en el diseño, la moda y el trenzado como elemento característico de sus colecciones.

Para el trenzado, se utilizan tiras de cuero que son cuidadosamente entrelazadas para crear patrones y diseños específicos. Los artesanos expertos de la compañía realizan el trenzado a mano, siguiendo técnicas tradicionales transmitidas de generación en generación. Además del trenzado, que le ha valido reconocimiento en mercados como Francia, otro gran desarrollo de Pons Quintana en sus orígenes fueron las babuchas, un tipo de calzado masculino que no llegó a patentar.

A partir de los noventa, Pons Quintana impulsó su notoriedad y comenzó su proceso de expansión nacional e internacional (actualmente exporta el 70% de su producción). Hoy en día, la empresa cuenta con seis tiendas distribuidas en España, está presente en 21 países y produce entre 160.000 y 180.000 pares de zapatos al año para distribuir a escala global.