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La cartera ‘next gen’ de H&M: de Syre a Renewcell, con 181 millones de inversión

Las fibras de nueva generación son la nueva frontera de la moda, un territorio todavía por conquistar ante la falta de un tejido industrial con capacidad suficiente para dar respuesta a las necesidades del sector.                 

La cartera ‘next gen’ de H&M: de Syre a Renewcell, con 181 millones de inversión
La cartera ‘next gen’ de H&M: de Syre a Renewcell, con 181 millones de inversión
H&M ya se ha propuesto utilizar un 100% de materiales reciclados o sostenibles, un porcentaje que en 2023 alcanzó el 85%.

Celia Oliveras

3 abr 2024 - 05:00

Una de las primeras menciones del consejero delegado de H&M, Daniel Érver, en la conferencia con analistas posterior a los resultados del primer trimestre del ejercicio 2024 fue para Syre. Esta empresa es la última apuesta del grupo sueco para conseguir escalar la producción de materiales de nueva generación, y su mención apenas daba comienzo la conferencia puso de relevancia el peso que tienen actualmente este tipo de proyectos dentro de los grandes distribuidores de moda.

 

Los gigantes del sector tienen objetivos de sostenibilidad que cumplir, y para ello necesitan una industria que esté a la altura en términos de producción, escala y volumen. Los constantes altibajos de la industria de los materiales next gen, la presencia mayoritaria de pequeñas empresas y start ups o una tecnología todavía en desarrollo son algunos de los factores que obligan a los grandes retailers como H&M o Inditex a llevar a cabo inversiones que puedan impulsar el sector.

 

Concretamente, el grupo sueco invirtió 2.100 millones de coronas suecas (181,5 millones de euros) únicamente en 2023 en impulsar el uso de materiales reciclados y sostenibles (en la fase de comercialización y ampliación) y en la descarbonización de su producción, según se desprende de la Declaración de Sostenibilidad de la compañía.

 

“La industria de la moda depende de los materiales que se escogen para los productos, el packaging y del entorno. Es muy importante, por lo tanto, que escojamos los materiales adecuados para alcanzar la circularidad y objetivos sostenibles, así como desvincular el crecimiento empresarial de las fibras vírgenes”, reza la última memoria de sostenibilidad del grupo sueco.

 

En menos de una década, para 2030, H&M ya se ha propuesto utilizar un 100% de materiales reciclados o sostenibles, un porcentaje que en 2023 alcanzó el 85%, según el mismo informe de sostenibilidad. Para 2025, además, el grupo sueco prevé que hasta un 30% del material de sus prendas sea exclusivamente reciclado. ¿Quién es quién en las fibras next gen apoyadas por H&M?

 

 

La última gran apuesta del grupo sueco, y una de las más esperanzadoras del sector es, de hecho, la recién llegada Syre. A través de una inversión de 600 millones de dólares durante los próximos siete años, H&M prevé garantizar su acceso al poliéster de residuos textiles reciclados que produce la compañía.

 

Syre ha conseguido desarrollar una fibra reciclada, que se obtiene gracias al procesamiento de textiles posconsumo y posindustrial, de suficiente calidad para volver a producir nuevas prendas de ropa. La compañía, además, prevé alcanzar una producción industrial a gran escala a partir de 2026, con la apertura de su primera gran planta.

 

A pesar de que todavía se desconoce la ubicación de esta fábrica, que tendrá la capacidad de producir hasta 250.000 toneladas de su fibra reciclada, Syre ya ha puesto en funcionamiento una primera planta piloto donde producirá a lo largo del año 10.000 toneladas de este material.

 

La presencia de H&M en el sector, sin embargo, pasa también por la entrada en el capital de empresas ya establecidas en el mercado. Una de ellas es Infinited Fiber, la compañía finlandesa dueña de Infinna, una fibra de algodón reciclado fabricada a partir de residuos textiles de la industria.

 

En 2023, el grupo sueco, a través de su vehículo de inversión H&M Group Ventures, participó en una ronda de financiación de Infinited Fiber con el objetivo de aumentar la capacidad de producción de la planta piloto actual, así como impulsar la construcción de una nueva planta a gran escala.

 

Tras dos rondas de inversión, H&M se mantiene como uno de los principales inversores de la compañía finlandesa, junto con Inditex, TTY Management. La presencia del grupo en el capital de la compañía es de especial relevancia, ya que hasta un 59% de los materiales que utiliza son algodón.

 

 

A pesar de la gran apuesta de H&M en materiales de nueva generación, el grupo sueco también ha estado involucrado en el que parece uno de los grandes fracasos del sector: Renewcell. La compañía, fundada en 2021, está especializada en la producción de Circulose, una fibra reciclada extraída a partir de residuos de algodón y viscosa.

 

Tener a H&M como uno de sus grandes inversores o haber firmado acuerdos de venta con gigantes como Inditex, sin embargo, no ha evitado que la compañía se declara en bancarrota por falta de liquidación a principios de año.

 

A pesar de que el final de Renewcell todavía no es seguro, ya que recientemente informó que ha recibido “múltiples ofertas” para su rescate, su caso representa la inestabilidad de un sector que todavía está dando sus primeros pasos.

 

 

Como parte de esta estrategia de inversiones y colaboraciones, H&M también participó en una ronda de financiación de la norteamericana Keel Labs. La compañía, fundada en 2017, produce su hilo Kelsun fabricado a partir de algas y con una textura similar al algodón. La gran apuesta de valor recae, según la compañía, en que este tipo de vegetación no solo permite reducir la producción de algodón virgen, sino que absorbe más cantidad de dióxido de carbono que los bosques terrestres.

 

En 2022, la compañía cerró una ronda de financiación de trece millones de dólares en la que participó H&M y que le permitió expandir y escalar su producción de Kelsun. Según ha anunciado el grupo sueco, lanzará una primera colección fabricada a partir de esta fibra en 2024.

 

 

Dentro de los materiales orgánicos, H&M también ha formado una colaboración con el proyecto Rubi, que fue uno de los ganadores de los H&M Global Change Award. La iniciativa ha desarrollado una tecnología capaz de crear una fibra de viscosa a partir de las emisiones de dióxido de carbono capturadas de la atmósfera.

 

Según el grupo sueco, la nueva compañía está trabajando en escalar el prototipo ganador para poder producir un primer lote de fibra que se probará en la cadena de suministro de H&M.

 

Otra de las apuestas del grupo desde hace años pasa por la empresa TreeToTextile, que es propiedad de H&M junto con otras compañías como Ikea. A pesar de no estar basada en el reciclaje textil a textil, sino de madera, la compañía produce una fibra de celulosa que, asegura, mantiene las propiedades de tintado, textura o comodidad del algodón tradicional.

 

Durante 2023, la compañía dio comienzo a la construcción de una planta de producción a través de una inversión de 35 millones de euros, en la que ha participado H&M y que permitirá escalar este material. Hasta el momento, el grupo sueco también ha participado en diferentes ensayos de TreeToTextile para optimizar la hilatura de esta fibra, que ya ha conseguido aplicar en todo el proceso de hilado, secado y corte.

 

 

De vuelta al poliéster, el grupo sueco también ha invertido en la empresa Kintra Fibers, que ha conseguido desarrollar una fibra de poliéster que, al contrario que el tradicional, es compostable, lo que facilita su proceso de reciclaje. Para ello, la compañía ha creado un PET formado en un 56% de maíz y azúcar, lo que facilita su posterior descomposición, con el que se pueden producir tejidos similares a los de poliéster tradicional.

 

La compañía cuenta con el apoyo de grandes compañías del sector, como la propia H&M, que lideró una ronda de financiación de Kintra Labs en 2023 para ampliar sus capacidades de producción de este hilo. Además de contar con el grupo sueco entre sus socios, la empresa colabora con otros gigantes del sector como Inditex o Bestseller.

 

La financiación también contempla varias pruebas piloto de estas fibras en colecciones de estas compañías.