La caída de las expectativas económicas lastra el gasto de los hogares

El consumidor reduce el gasto en los hogares españoles. Un retroceso en las expectativas económicas y las previsiones de ingresos de los hogares en España lastrará el gasto familiar, que continúa estancado, tal y como recoge el recién publicado GfK Euro Clima de Consumo relativo a septiembre.

Los resultados de septiembre confirman la pérdida de confianza de la población española respecto a la marcha de la economía del país, Una tendencia que se inició en agosto y ahora sitúa el indicador de expectativas económicas en 17 puntos negativos, tras una caída de 11 puntos.

En Europa el comportamiento es similar. Las expectativas de la población respecto a las economías de sus países han caído ligeramente dos puntos hasta los 12 puntos negativos, mientras las previsiones de ingresos lo hicieron tres, llegando a 16 puntos negativos. La disposición a comprar se ha mantenido estancada en un 30 puntos negativos.

España es junto con Grecia, Finlandia y República Checa (que caen 19, 18 y 13 puntos, respectivamente) uno de los estados con las mayores bajadas más acusada de Europa. Lituania, en cambio, registra un valor positivo de 7. 

La expectativa de ingresos familiares en España desciende once puntos y afecta a la disposición a comprar

“La percepción de la población sobre la marcha de la economía del país influye directamente en las expectativas de los ingresos en los hogares”. En septiembre, España registra, como sucede con el indicador de expectativas económicas, un descenso de 11 puntos en la expectativa de ingresos. De esta forma, el índice se cierra con 16 puntos negativos, el peor valor desde marzo.

La disposición a comprar, sin visos de reactivación del gasto en España. El indicador que mide el consumo de las familias ha vuelto a resentirse en septiembre, a pesar de haber sido el único índice que ha mejorado los últimos tres meses. Tras una bajada de cuatro puntos, la disposición al gasto se ha situado en 30 puntos negativos, valor cercano a los 32 puntos negativos de mayo. 

Las caídas de los indicadores de expectativas económicas e ingresos han afectado esta vez a las previsiones del gasto familiar. España se coloca así a la par que la media de la UE y se sitúa en la posición 18, bajando 3 puestos, del ranking de los 29 países estudiados. De ellos, únicamente dos están en positivo, Bulgaria, con 21, y Hungría, 12.