Entorno

El Parlamento británico resuelve que el ‘fast fashion’ es “explotador” e “insostenible”

El Comité de Auditoría Medioambiental de la cámara baja británica ha concluido su investigación sobre el impacto de la moda que inició antes del verano. El informe indica también los grupos más comprometidos y los que menos.

Modaes

31 ene 2019 - 12:11

El Parlamento británico resuelve que el ‘fast fashion’ es “explotador” e “insostenible”

 

 

La moda suspende el examen del Parlamento británico. El Comité de Auditoría Medioambiental de la Cámara Baja británica ha concluido su investigación sobre el impacto de la moda y en ella resuelve que la industria de la moda del país, que se rige por el sistema fast fashion, es “explotadora” e “insostenible”.

 

El trabajo de investigación, que se ha centrado en los 16 mayores retailers británicos, con una facturación conjunta de 32.000 millones de libras (42.000 millones de euros), pone en entredicho un modelo de negocio que motiva al sobre consumo, genera un exceso de residuos y fomenta el empleo de salarios bajos, según Reuters.

 

“El actual modelo de explotación y daño medioambiental de la moda debe cambiar”, afirma el documento. El comité responsable de la investigación preguntó también a los grupos de distribución sobre cuestiones como las condiciones laborales, el uso de materiales sostenibles o el reciclaje del stock.

 

 

 

 

En su informe final, el grupo de parlamentarios miembros de esta comisión señalan que sólo un tercio de las marcas encuestadas habían iniciado alguna acción para mejorar las condiciones salariales de los trabajadores. El documento acusa a empresas como JD Sports, Sports Direct, TK Maxx, la filial británica de Reino Unido, Boohoo y Missguided, como los menos comprometidos.

 

En sentido contrario, también se hace hincapié en el esfuerzo realizado en este sentido por compañías como Asos, Marks&Spencer, Tesco, Primark y Burberry. El informe también denuncia que la marca de lujo Kurt Geiger ni siquiera dio respuesta.


El pasado junio, el Parlamento británico creó este comité para analizar el impacto de la industria de la moda
, poniendo en entredicho la viabilidad social y medioambiental del sistema del fast fashion. La Cámara de los Comunes dio este paso después de hacerse público un informe en el que se desvelaba que cada año se tiran a los vertederos 300.000 toneladas de artículos de vestir, el equivalente a un camión de basura lleno de ropa por segundo.