Louis Vuitton o cómo Barcelona quiere volver a emocionar gracias a la moda

Más de mil celebridades, periodistas y gente guapa de todo el mundo. Esto es lo que quiere llevar a la capital catalana Bernard Arnault el próximo mayo. La firma estrella de LVMH, Louis Vuitton, anunció por sorpresa la semana pasada que el desfile de su colección crucero se celebrará en Barcelona. A este evento, que servirá para calentar motores de la Louis Vuitton America’s Cup (el tercer acontecimiento deportivo más seguido a escala global), se agarra el Ayuntamiento de Barcelona para revitalizar la ciudad y volver a emocionar al mundo como hizo en los Juegos Olímpicos de 1992.

La marca del grupo LVMH, que fue title partner de la Copa América durante más de tres décadas, hasta 2017, ha vuelto a firmar con la competición y además dará nombre a la próxima edición, que se celebrará en Barcelona de agosto a octubre. La organización del desfile crucero de Louis Vuitton en la ciudad es una decisión de la marca para maximizar su patrocinio, y el Ayuntamiento ha puesto la ciudad a su disposición.

Louis Vuitton cuenta con el apoyo institucional del Ayuntamiento de Barcelona, que ha dispuesto un equipo encabezado por Laia Claverol, gerente del área de Economía y Promoción Económica, que depende de Albert Dalmau, gerente de Economía, Recursos y Promoción Económica del Ayuntamiento de Barcelona. 

El desfile de la colección crucero de la histórica marca francesa, bajo la dirección creativa de Nicolas Ghesquière desde 2013, incluirá una exposición, activaciones culturales y programas educativos. En paralelo al show, lanzará su guía de la ciudad a través de un quiosco emergente y un evento.

Pero Louis Vuitton no es la única marca que realizará eventos con motivo de la competición deportiva.

Eventos como la Louis Vuitton America’s Cup o los Latin Grammy repercuten en la ocupación hotelera

De todos los sponsors del evento, las de moda son las marcas más internacionales, entre las que se encuentran Prada, Puig, Tudor u Omega. Por el precio del patrocinio, del que no se conoce la cifra exacta, pero asciende a decenas de miles de euros, según fuentes expertas, lo rentable es hacer activaciones y las activaciones en moda son eventos de repercusión internacional. “Este tipo de eventos en el marco de la Louis Vuitton America’s Cup servirán a Barcelona para impulsar su imagen internacional, no sólo en cantidad sino en calidad”, señalan fuentes de la ciudad.

Paco Caro, fundador de la agencia Equipo Singular, explica que, sobre todo, este tipo de eventos “repercuten en el ánimo de la ciudad”. “En los Grammy de Sevilla, la ciudad entera hervía: la gente se siente orgullosa de un acontecimiento así”, agrega, algo que se suma, por supuesto, al impacto económico en las ciudades.

Los Grammy Latinos convirtieron Sevilla, durante una semana, en la capital mundial de la música latina, dejando un impacto económico de 100 millones de euros en la ciudad, doblando las previsiones que se estimaban de 50 millones de euros, según el alcalde de la ciudad, José Luis Sanz.

La cita musical, celebrada el pasado 16 de noviembre en el Palacio de Exposiciones y Congresos de Sevilla, aumentó la ocupación de hoteles de lujo y gran lujo a un nivel muy alto en comparación con otros noviembres. La ocupación hotelera durante la semana de los Grammy Latinos estuvo por encima de los 83%, con el cartel de completo en casi todos los hoteles de lujo y super lujo de Sevilla, según el presidente de la asociación de hoteleros, Manuel Cornax.

Los expertos prevén que el desfile de Louis Vuitton tenga más impacto que el que tuvo Dior con su desfile en la Plaza de España de Sevilla en 2022. “Sólo el impacto económico directo en promoción y comunicación de la ciudad superó los 100 millones de euros; pero, además, hay que valorar el impulso que supone para la moda y la artesanía de Sevilla, que han estado presentes en los modelos del desfile”, destacó el que era alcalde de la ciudad ese año, Antonio Muñoz.

 Dior escogió Sevilla como destino de su desfile en junio de 2022.

En el caso de las semanas de la moda, el impacto se extiende de la pasarela a las tiendas. A medida que se revelan las últimas colecciones, los consumidores se inspiran a actualizar sus armarios, lo que genera mayores ventas. El gasto medio está alrededor de los 250 euros por persona en periodo de fashion week.

La Semana de la Moda de Nueva York aporta casi 900 millones de dólares anuales a la economía de la Gran Manzana, que dos veces al año es, además, testigo de un notable aumento del turismo. El evento juega un papel crucial en los ingresos inmobiliarios de la ciudad de Nueva York, ya que requiere el alquileres y reservas de varias localizaciones para desfiles, presentaciones y fiestas. Por ejemplo, Chanel alquiló el Lucky Chance Diner para promocionar su nueva fragancia.

La semana de la moda neoyorquina genera, además, más de 180.000 puestos de trabajo. Desde planificadores de eventos y maquilladores hasta proveedores de catering y personal de seguridad, una amplia gama de personas encuentra empleo durante el evento.

La previsión para 2024 es que Estados Unidos genere 68.700 millones de dólares en ingresos por eventos en vivo, según PwC, lo que supone un aumento del 3% respecto a los 66.6 mil millones de dólares previos a la pandemia de 2019.

Más de cerca de España, la Semana de la Moda de Londres, que cumplió 40 años en febrero, lo que significó activaciones especiales en toda la ciudad, elevó las ventas de ropa femenina y masculina en el Reino Unido hasta los 47.500 millones de libras en 2023, poniendo de relieve el importante impacto económico del evento.

La semana de la moda madrileña es una palanca para el comercio y la hostelería

En nuestro país, Mercedes-Benz Fashion Week Madrid es también una palanca para el comercio y la hostelería y el desfile de la colección crucero de Louis Vuitton en el puerto de Barcelona en mayo, promete movilizar la economía de la capital catalana.

En Madrid la moda es uno de los principales ejes comerciales y de crecimiento de la ciudad. “Dentro de la estrategia de fomento de la actividad comercial y hostelera, una de las palancas de posicionamiento de la ciudad es la moda, junto a la gastronomía y la artesanía”, subraya Concepción Díaz de Villegas Soláns, directora general de Comercio, Hostelería y Consumo del área de Gobierno de Economía, Innovación y Hacienda del Ayuntamiento de Madrid.

“El impacto económico es total, ya que la moda es clave en los ejes comerciales y contribuye al crecimiento de la ciudad”, señala Díaz, quien añade que “creemos tanto en ello que tenemos líneas de subvenciones para diseñadores de dentro y fuera de Madrid y para el impulso de proyectos como Mercedes-Benz Fashion Week Madrid, Madrid es Moda, Atelier Couture y Cabalgando entre costuras”.