Entorno

Rebajas: optimismo ante el primer repunte del gasto después de seis años

C. Pareja/ S. García

2 jul 2012 - 04:53

Al mal tiempo, buenas rebajas. Ayer, seis comunidades autónomas españolas, entre ellas Cataluña, iniciaron su temporada de rebajas de verano marcadas por el comienzo de las vacaciones y el calor, en unos casos, y la lluvia y los truenos, en otros. Ninguno de estos factores ha impedido a los consumidores acercarse a sus tiendas de cabecera para realizar sus primeras compras con descuento del verano. Inditex, Mango, Blanco o H&M han dado el pistoletazo de salida a las rebajas con descuentos de hasta el 70%.

 

Esta temporada de rebajas se ha percibido en el sector como una bocanada de aire a la coyuntura económica. La Confederación Española de Comercio prevé un “repunte” del 10% de las ventas de la campaña de rebajas hasta totalizar 3.630 millones de euros. “El comercio afronta el inicio de rebajas con cierto optimismo”, aseguran desde la confederación.

 

Según la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (Anged), más de cinco millones de personas acudieron ayer a la primera jornada de rebajas. El consumidor compra menos en temporada y se reserva gran parte de su presupuesto para la época en la que las cadenas y marcas de moda liberan sus prendas de temporada con grandes descuentos.

 

Las empresas de distribución confían en que las ventas de las rebajas de verano aumenten un 1,5% respecto a las registradas en el mismo periodo del año anterior. La Asociación de Comercio Textil y Complementos (Acotex), por su parte, esperan que el sector registre una cifra de negocio durante el periodo de rebajas de verano de 3.500 millones de euros.

 

Este año descenderá un 20% el número de consumidores que comprará en rebajas, pero aumentará el gasto previsto por primera vez en seis años, ya que cada español gastará una media de 60 euros, un 16,6% más que en 2011, según una encuesta de la Federación de Usuarios-Consumidores Independientes (FUCI).

 

En el centro comercial La Maquinista, ubicado en Barcelona, los consumidores se mezclaban entre los paraguas y los chubasqueros. Una de las primeras paradas es Zara, donde la nueva imagen de la cadena estrella de Inditex ayudó a los clientes a poder disfrutar de una experiencia de compra totalmente distinta a la de años anteriores.

 

Pequeños cubículos divididos por prendas que recuerdan a un gran almacén reparten el espacio del establecimiento de Zara en el complejo comercial. Americanas para hombre a 39 euros y prendas de punto a partir de 19 euros. Las mujeres, que gozan de una mayor variedad que el hombre, se apoderaban de aquellas prendas que no compraron en temporada.

 

El gigante sueco H&M no consiguió captar la misma atención que las enseñas del grupo Inditex. Las colas en las cajas de pago no eran muy extensas y los visitantes del establecimiento observaban las prendas, pero la mayoría de ellas no terminaban en las bolsas de compra de los clientes. Decenas de carteles colgados del techo avisaban de las rebajas, pero los rótulos que rezaban los precios de las prendas eran blancos con letras negras, un estilo que se alejaba mucho del resto de cadenas.

 

“No voy a comprar el primer día de rebajas algo de temporada”, exclamaba un hombre. La falta de dependientes, algo que se podía apreciar en todas las cadenas, hacían que los clientes menos pacientes huyeran de las tiendas sin realizar ninguna compra. El desorden y la mezcla de prendas hacían que la experiencia de compra en muchas tiendas, como Blanco y H&M, fuera bastante “estresante”.

 

En Blanco, los escaparates anuncian un 70% de descuento en todas sus prendas. La cola de clientes para pasar por caja daba la vuelta a la tienda entera. Los consumidores buscaban la talla de las prendas que querían por el suelo, los colores ácidos se mezclan con las prendas de crochet o camisetas estampadas. Los precios de Blanco, muy apetecibles para los consumidores de esta cadena, fueron uno de los detonantes del éxito de la primera jornada de rebajas de la compañía.

 

En Mango el ambiente es totalmente distinto. Las prendas están bien colocadas, los espacios están delimitados (vaqueros, camisas, chaquetas, calzado…) y sus consumidores son más ordenados. Las clientas de la cadena catalana también aguantaron colas kilométricas para hacer sus primeras compras de rebajas.

 

Otras cadenas, como la francesa Pimkie, han iniciado su temporada de rebajas con descuentos que van desde el 20% hasta el 70%, mientras que otras marcas como la italiana Benetton o la estadounidense Levi’s no congregaban a un gran número de clientes en sus establecimientos.