Entorno

La moda se prepara para el fin del Ramadán después de tres años lastrados por el Covid

Las marcas luchan por ganar relevancia en los días más festivos del año en la región de Oriente Próximo y Norte de África, un mercado para la moda de 89.000 millones de dólares anuales que espera anotar un crecimiento anual del 7% hasta 2027.

La moda se prepara para el fin del Ramadán después de tres años lastrados por el Covid
La moda se prepara para el fin del Ramadán después de tres años lastrados por el Covid
Para este año, se prevé que las compras durante el Ramadán aumenten un 44% en 2023 respecto año anterior, según datos de la agencia saudí Toluna recogidos en el país.

M. Tamayo

21 abr 2023 - 05:00

La moda celebra el fin del Ramadán. La actividad social ha vuelto al Ramadán por primera vez después de tres años a medio gas por la pandemia, y la moda no se quiere quedar fuera de la euforia post-Covid. Igual que para las navidades, las marcas del sector toman posiciones para postularse como el regalo perfecto para el fin del mes de ayuno y recuperar las ventas de antes de la pandemia.

 

Antes de la irrupción del Covid-19, Londres, París y Milán se transformaban en los centros de compras de lujo al término del mes, en la apodada “fiebre del Ramadán”. El fenómeno empezó a recuperarse el pasado año en Reino Unido, cuando las compras de turistas procedentes del Golfo recuperaron un 65% del terreno perdido. En Francia e Italia consiguieron superar los datos de 2019, según la financiera Global Blue.

 

Más allá de las grandes capitales europeas, el consumo local gana peso. Para este Ramadán, se estima que el gasto en la región de Oriente Próximo y Norte de África (Mena, por sus siglas en inglés) se ha elevado hasta 66.000 millones de dólares, según datos Redseer Consulting.

 

Para este año, se prevé que las compras durante el Ramadán aumenten un 44% en 2023 respecto año anterior, según datos de la agencia saudí Toluna recogidos en el país. Aunque la moda no es de los regalos más populares que se esperan para el Eid al-Fitr, la fiesta con la que se celebra el fin del ayuno, le pasan por delante la comida, el dinero y los juegos y juguetes, pero le siguen perfumes, cosmética y ropa.

 

La encuesta también señala que los consumidores serán más proclives a comprar online durante estas fiestas y un 40% de los encuestados apunta que compran por Internet moda y juguetes.

 

 

 

 

Ante las expectativas del aumento del gasto, el lujo ha redoblado la oferta para hacerse un hueco entre las compras festivas del mes. Louis Vuitton ha sacado una colección espacial junto con la modelo italomarroquí Malika El-Maslouhi compuesta por faldas plisadas, vestidos tipo abrigo de color azul y vestidos camiseros de seda con monograma.

 

También lo ha hecho Dior tanto en línea de hombre como de mujer, que protagoniza la actriz libanesa Razane Jammal, o Bottega Veneta, que ha sacado una edición limitada de sus icónicos bolsos mini jodie y clicker bag en nuevos colores: verde y marrón. La campaña ha llegado también al pure player de lujo Mytheresa, que se ha aliado con la influencer saudí Nojoud Al-Rumaihi.

 

No son las únicas marcas con ganas de capitalizar el Ramadán tras años a medio gas: también han sacado colecciones especiales Victoria’s Secrtet o Pepe Jeans, y las compañías de cosmética Estée Lauder y Maybelline, que ha debutado este año con una campaña especial para la cita.

 

El Ramadán también es la oportunidad perfecta para las marcas para ganar terreno en un mercado para la moda de 89.000 millones de dólares anuales que espera anotar un crecimiento anual del 7% hasta 2027, según datos de Euromonitor. De la región de Oriente Próximo y Norte de África, Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudí copan la mitad las ventas de moda y se convertirán en el foco del comercio local, haciéndole la competencia a las ciudades europeas.