New Balance y Asics siguen los pasos de Nike y reducen su peso en multimarca

New Balance y Asics se suman a la estrategia de Nike. Ambas compañías de equipamiento deportivo han anunciado que dejarán de vender sus productos a distribuidores independientes a partir de 2024, reduciendo su presencia en el canal multimarca con el objetivo de centrar su distribución en las ventas directas, según ha recogido Drapers.

De momento, la medida se llevará a cabo en Reino Unido, dejando de operar con los independientes británicos, como Sport Crest, Ace Sports o Runnersworld, donde Asics genera entre el 20% y el 30% de las ventas totales de la tienda. Según ha recogido el mismo medio, la estrategia de las compañías es continuar distribuyendo en el canal multimarca, pero a través de franquicias de moda deportiva.

Esta estrategia fue iniciada por Nike hace unos años. En 2017 la empresa de moda deportiva anunció la puesta en marcha de una estrategia para reducir en cada vez en menos más su negocio wholesale y, en paralelo, elevar el peso de sus ventas directas, es decir, a través de tiendas propias y canal digital. Esta estrategia, conocida como direct to consumer, permite a Nike ganar margen y multiplicar sus ventas elevando la interacción con sus consumidores. El mismo método que quieren seguir ahora New Balance y Asics.

New Balance y Asics dejarán de operar con distribuidores independientes en Reino Unido a partir de enero de 2024

En España, Nike decidió servir exclusivamente a nueve cadenas en 2021. En concreto, la compañía de moda deportiva decidió trabajar en España junto a El Corte Inglés, Foot Locker, Décimas, Forum Sport, JD Sports, Sprinter, Atmósfera, Base, Intersport y Tréndico. Entre todas ellas suman alrededor de 2.000 puntos de venta en el mercado nacional.

Según los últimos datos, New Balance cerró el ejercicio 2022 con una facturación de 5.300 millones de euros y en marzo la compañía de moda deportiva avisó que ampliaría de una de sus plantas de fabricación de Skowhegan (Estados Unidos), en la que invirtió 65 millones de dólares con el objetivo de aumentar la producción y “satisfacer la demanda”.

Asics, por su parte, cerró el primer trimestre de 2023 disparando sus ingresos un 44,6%, hasta 152.297 millones de yenes (1.027 millones de euros). Gracias a la mejora en su facturación, Asics concluyó los primeros tres meses del año con un beneficio de 16.310 millones de yenes (103,9 millones de euros), lo que supone un incremento del 86,9% respecto al resultado de marzo del pasado año.