Harry Styles invierte en la firma británica S.S. Daley

Harry Styles, del escenario a la moda. Tras vestir de la firma británica S. S. Daley desde su fundación en 2020, el cantante inglés ha adquirido una participación minoritaria en la empresa. El objetivo de la compra es engordar el negocio con una “expansión sostenible y a largo plazo”, según ha avanzado la empresa en un comunicado. El importe de la operación no ha trascendido.

 

La empresa de moda que reinterpreta el preppy británico, dio sus primeros pasos el año de la pandemia de la mano del diseñador británico Steven Stokey-Daley. La firma cuenta con división femenina y masculina y los precios de las prendas oscilan entre las doscientas libras esterlinas y las 600 libras esterlinas.

 

Dos años después de su fundación, la empresa ganó el premio LVMH para jóvenes diseñadores, lo que impulsó la visibilidad de la firma. Además, ha ido aterrizando en ferias internacionales, siendo su última parada Pitti Uomo, donde coincidió con el propio Styles. De momento, la firma sólo distribuye en el canal online a través de su propia web.

 

 

 

 

Harry Styles ha hecho otros movimientos en moda, siendo esta su primera inversión en otro operador. Concretamente, el cantante británico lanzó en 2021 una compañía de cosmética llamada Pleasing. En junio, la compañía nombró a su primer consejero delegado, Shaun Kearney, que cuenta con 25 años de trayectoria en el sector tras haber pasado por otros operadores como Goop.

 

No es el único cantante que ha dado el paso a la moda a lo largo de su trayectoria profesional. La estadounidense Rihanna lanzó Savage x Fenty en 2018. La firma nació en el seno de Techstyle Group (la antigua JustFab), que opera también con la compañía de moda deportiva Fabletics y con JustFab.

 

La empresa operaba únicamente en el canal online hasta que en octubre de 2021 dio el salto al retail con el objetivo de acelerar su expansión en Europa. La compañía está especializada en moda íntima y se hizo rápidamente un hueco en el sector estadounidense de la ropa interior por su variedad de tallas, hasta ese momento dominado por las blancas y delgadas ángeles de Victoria’s Secret.

 

En enero de 2022, la compañía de moda íntima cerró una ronda de financiación con la que levantó 115 millones de dólares, participada por L Catterton (el brazo inversor del conglomerado francés LVMH).