Gap reduce ventas un 7% en el tercer trimestre y aumenta la cautela en el estreno de Dickson

Richard Dickson se estrena en Gap con una de cal y una de arena. El grupo estadounidense ha cerrado el tercer trimestre con una evolución mejor de la esperada, lo que disparó un 15% sus acciones en el parqué el jueves, pero aumenta la cautela de cara al ejercicio. Son los primeros resultados que presenta Richard Dickson, que se incorporó a Gap procedente de Mattel el pasado 22 de agosto.

Dickson ha subrayado que Gap ha incrementado su cuota de mercado y ha mejorado tanto el margen bruto como el operativo, “demostrando nuestra capacidad para impulsar la disciplina operativa y financiera”.

Entre agosto y octubre, Gap facturó 3.767 millones de dólares, un 6,7% menos que en el mismo periodo del año anterior, incluyendo un impacto dos puntos por la venta del negocio en China. Las ventas online siguieron en descenso, con una caída del 8%, y aportan el 38% de la facturación.

Gap mejoró su margen bruto hasta el 41%, incluyendo el impacto de la ruptura con Kanye West

La empresa recogió los frutos de su reestructuración y la mejora de su marca Old Navy y siguió engordando su margen bruto, hasta el 41,3%, excluyendo los cargos por el cese del negocio de Yeezy. Si embargo, el resultado neto siguió a la baja, con un descenso del 22,7%, hasta 218 millones de dólares.

Todas las marcas mejoraron su facturación en el ejercicio con incrementos a doble dígito, liderados por Athleta y Gap. La excepción fue Old Navy, la mayor marca del grupo, que mantuvo los ingresos planos respecto al año anterior, aunque mejoró el desempeño de trimestres anteriores.

Por mercados, en Estados Unidos, que copa el 87% de la facturación de Gap, las ventas se incrementaron un 4,4%. En cambio, las ventas se redujeron un 2% en Canadá y se dispararon en Asia y Europa, si bien su aportación a la facturación es reducida.

El grupo ha reducido su previsión de aperturas y, en consecuencia, la estimación de capex

En lo que va de año, Gap ha reducido un 7% su facturación, hasta 10.591 millones de dólares, pero ha disparado su resultado neto, hasta 317 millones de dólares, frente a los 71 millones del año anterior.

La compañía ha reafirmado su previsión para el año completo, con un descenso de un solo dígito, pese a que este ejercicio tiene una semana más. En el cuarto trimestre, Gap anticipa ingresos en línea con los del año anterior.

La empresa cuenta un impacto positivo de 150 millones de dólares por esa semana extra, que compensará parcialmente este año la pérdida del negocio en China, que aportaba 90 millones de dólares en el cuarto trimestre de 2022.

Pese a que mantiene previsiones, Gap ha aumentado la cautela y ha rebajado las previsiones de aperturas, hasta un total de entre quince y veinte aperturas netas de Old Navy y Athleta. Para Gap y Banana Republic, mantiene la previsión de cerrar cincuenta tiendas, completando el plan de cerrar 350 en total durante el año.

El grupo espera registrar un descenso de ventas a un solo dígito en el ejercicio 2023

La rebaja en la previsión de aperturas ha llevado al grupo ha reducir también su estimación de capex para el ejercicio, que se sitúa ahora en 475 millones de dólares, frente al rango de entre 500 millones y 525 millones de dólares anticipado anteriormente.

A 28 de octubre, Gap operaba con una red de 3.533 establecimientos, de los cuales sólo 935 son franquicias. El grueso de la red corresponde a tiendas de Old Navy en Norteamérica, con 1.251 puntos de venta.

Fundada en San Francisco en 1969, Gap llegó a ser la mayor empresa de distribución de moda del mundo. Hoy ocupa el tercer puesto, detrás de Inditex y H&M y en puja continua con la japonesa Fast Retailing.