El Corte Inglés sigue reordenando su retail y transforma su centro en Arapiles en un outlet de moda

El Corte Inglés sigue buscando fórmulas para rentabilizar su red de centros. El grupo de grandes almacenes convertirá su centro de Arapiles (Madrid) en un outlet especializado en moda, accesorios y zapatería.

La empresa ha encargado el diseño del espacio comercial al interiorista Lázaro Rosa Violán, que ha trabajado con cadenas de moda como Zara. El centro contará, además de con el outlet de moda, con un espacio de arte (The Coffee Gallery), un espacio de restauración, una Optica2000, que reabrirá en junio, y una agencia de Viajes El Corte Inglés.

El outlet de moda ofrecerá más de 150 marcas con descuentos que llegarán hasta el 70% y una vez al mes incorporará propuestas especiales en una selección de marcas. En The Coffee Gallery, desarrollado de la mano de la firma Urvanity Lab, se podrán adquirir a través de un código bidi ediciones limitadas de artículos de estética japonesa que incluyen tanto grabados, amuletos, como iconos de la cultura popular nipona.

El Corte Inglés mantendrá el supermercado, la óptica y la agencia de viajes en el centro

El mes pasado, la compañía anunció que convertirá su centro de Marineda City, en A Coruña, en un outlet de dos plantas de moda y hogar. El otro centro del grupo en la ciudad, ubicado en la calle Ramón y Cajal, se renovará, ampliando las divisiones de hogar, tecnología y deportes.

En marzo, la compañía también transformó su centro de Eibar en una dark store. La tienda, la primera con estas características en País Vasco, se ha convertido así en una gran instalación de preparación y distribución de pedidos de alimentación para el comercio electrónico que dará servicio tanto a Vizcaya y Alava como a Guipúzcoa.

La empresa también ha realizado algunos cierres significativos como el de Francesc Macià, en Barcelona, que echó el cierre a principios de este año.  

El Corte Inglés cerró el segundo trimestre (entre junio y agosto) del ejercicio 2020 con una

caída de ventas del 30%, aunque volvió a registrar un resultado bruto de explotación (ebitda) positivo, tras entrar en pérdidas en el primer trimestre. La compañía facturó 2.817 millones de euros, con un beneficio bruto de 811 millones de euros. El ebitda se situó en 64 millones gracias, según la empresa, a la reapertura de tiendas y la venta online.