Cosmética

Perfumería de marca blanca, ¿se acabó el ‘boom’?

Después de varios años copando los locales vacíos de las calles y ganando cuota de mercado, los datos y los expertos coinciden en que el crecimiento de las compañías de perfumes de marca blanca ha tocado techo.

C. Juárez

23 abr 2019 - 04:43

Perfumería de marca blanca, ¿se acabó el ‘boom’?

 

 

Un local vacío en cada esquina que dio lugar a un local de perfumería de marca blanca. Hace casi diez años nacieron varias empresas en el sector de la perfumería dedicadas a la distribución de productos de marca blanca o equivalencia. Estas compañías, con Equivalenza al frente, ocuparon los establecimientos que la crisis había dejado vacíos. Ahora, casi una década después, los datos y los expertos coinciden en que el boom de la perfumería de marca blanca ha llegado a su fin.

 

Equivalenza fue una de las primeras compañías especializadas en la venta de perfumes de marca blanca en España. La empresa, que nació en 2011, se convirtió pronto en el segundo mayor grupo de perfumería en España, basando su negocio en el retail y las franquicias. Tras ella, otras compañías como Saphir o la Botica de los Perfumes vieron un filón en este segmento de mercado.

 

El nuevo fenómeno se alimentó, en parte, del mismo motivo que provocó de forma paralela un boom de tiendas especializadas en cigarrillos electrónicos: muchos desempleados de la crisis vieron en el segmento una oportunidad de autoempleo. Y las aperturas de nuevos establecimientos se dispararon.

 

 

 

 

Pero ahora, el auge de este segmento de consumo ha disminuido hasta “paralizar su crecimiento”, según afirma Luis Labad, presidente de la Asociación Europea del Perfume y la Cosmética (Apce). “El negocio de estas compañías se ha consolidado y se ha asentado en el mercado”, afirma el experto.

 

Los datos también apuntan hacia esta tendencia. Según Eduardo Abadía, director ejecutivo de la Asociación Española de Franquiciadores (Aef), “el sector de las perfumerías de marca blanca se ha consolidado en el mercado, después del boom que tuvo hace unos años”.

 

“Hoy en día ya no tiene los crecimientos y aperturas que tuvo en sus inicios, porque se han ido copando la práctica totalidad de ciudades españolas e incluso algunas marcas han dado el paso de salir al exterior”, explica Abadía.

 

 

 

 

La empresa de estudios de mercado Kantar también confirma la tendencia del fin del boom de las compañías especializadas en perfumes de imitación. De hecho, según datos de la compañía, este segmento registró una caída del 7,5% de consumidores en 2017, hasta los 2,3 millones de consumidores.

 

Sin embargo, en 2018 el consumo de fragancias de imitación ha registrado un leve aumento, del 0,5%, aupado por la caída de la perfumería selectiva, que ha reducido un 3,2% el número de consumidores por persona al mes.

 

Además, también ha irrumpido con fuerza otro segmento que ahoga el crecimiento de la perfumería de marca blanca: el sector de gran consumo, con Mercadona o Lidl tomando la delantera.

 

En 2018, este segmento de mercado registró un alza del 2,8% del número de compradores, según los datos de Kantar. De hecho, aunque el precio medio por unidad es más alto en gran consumo, 10,92 euros frente a 8,49 euros de las marcas blancas, la cifra de compradores es el doble.

 

 

 

 

Mientras que la perfumería de imitación cuenta con 4,8 millones de consumidores residentes en España, el mercado de gran consumo alcanza los 9,7 millones de consumidores residentes en el país. Además, el gran consumo también supera en compra media a las marcas blancas, con 2,6 unidades frente a 2,4 unidades.

 

La moderación del número de compradores de perfumería de imitación coincidió también con el descenso de sus resultados. En 2017, Equivalenza registró unas pérdidas de 1,5 millones de euros, frente a los números rojos de 383.526 euros del año anterior.

 

Según las cuentas individuales de la sociedad Equivalenza Retail depositadas en el Registro Mercantil, las ventas del grupo, en cambio, se multiplicaron por dos en 2017, hasta 27 millones de euros. El motivo del incremento de la cifra de negocio de la sociedad fue la absorción de la sociedad Equivalenza Manufacturing.

 

 

 

 

La Botica de los Perfumes, por su parte, disminuyó un 12% sus ventas en 2017, hasta dos millones de euros, según las últimas cuentas depositadas en el Registro Mercantil. Además, durante el ejercicio, el grupo entró en pérdidas con unos números rojos de 203.344 euros.

 

La sociedad Saphir Parfums, que controla el negocio de la compañía de perfumes,

también registró una evolución negativa de su facturación durante el ejercicio 2017. En concreto, los ingresos del grupo cayeron un 3%, hasta 16,9 millones de euros. En cambio, el resultado del grupo se situó al alza, con un incremento del 5%, hasta 1,6 millones de euros.

 

En paralelo, otras empresas que nacieron especializadas en este segmento han variado su modelo hacia la perfumería premium, como es el caso de Drops by Toni Cabal, en la que el publicista y presentador de televisión Risto Mejide tiene una participación.

 

 

 

 

Al límite de la legalidad

El crecimiento de las compañías especializadas en este segmento estuvo reñido con batallas internas dentro del sector por cuestiones de ilegalidad. La guerra en el sector comenzó cuando Puig demandó por usar de forma ilícita algunas de sus marcas a Saphir, que tuvo que abonar cuatro millones de euros en concepto de daños y prejuicios.

 

Desde entonces, el gigante español de la perfumería también inició la batalla con otras empresas como Equivalenza o La Botica de los Perfumes, condenadas ambas por infracción de marca, lo que hizo que viraran el modelo hacia el monomarca sin explicitar los perfumes imitados, modelo con el que iniciaron el negocio.

 

La Asociación Nacional de Perfumería y Cosmetica (Stanpa) también se posicionó en contra de la práctica de las empresas especializadas en perfumes de imitación. Haciéndose eco de la opinión general del sector, Stanpa explicó que se encontraban satisfechos con la dureza de la indemnización.