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La ONU califica la industria del ‘fast fashion’ de “emergencia medioambiental”

En el marco de un evento dedicado al sector, autoridades del organismo destacaron que la industria de la moda es la segunda que más agua utiliza en sus procesos y que produce el 20% de las aguas residuales a escala global.

Modaes

5 mar 2018 - 17:24

La ONU califica la industria del ‘fast fashion’ como “emergencia medioambiental”

 

 

La Organización de las Naciones Unidas (ONU) pone al fast fashion en el punto de mira. En el marco de un evento dedicado al sector, autoridades del organismo y expertos han tildado de “emergencia medioambiental” al sector, dado sus impactos negativos en el entorno y la salud.

 

“Está claro que la industria de la moda debe cambiar sus engranajes y ser responsable con el medio ambiente”, ha afirmado Olga Algayerova, secretaria ejecutiva de la Comisión Económica de las Naciones Unidas para Europa (Unece, por sus siglas en inglés). La ponente ha criticado que se deben promover hábitos de consumo sostenibles para atajar los numerosos problemas creados por el fast fashion.

 

La industria de la moda es la segunda que más agua utiliza en sus procesos del mundo, por detrás de la energética, y produce el 20% de las aguas residuales que se generan a escala global. Además, el sector es responsable del 10% de las emisiones de dióxido de carbono que se lanzan a la atmosfera, más que las que producen todos los vuelos internacionales y el envío marítimo de mercancías juntos.

 

 

 

 

Birgit Lia Altmann, otra de las analistas de la ONU que ha participado en el evento Fashion and the Sustainable Development Goals: What Role for the UN?, ha afirmado que se requieren más de 10.000 litros de agua para producir un kilo de algodón, lo suficiente para producir tan sólo unos vaqueros, y que equivale al agua que consumo un humano en diez años.

 

Además, medio millón de toneladas métricas de microfibras de plástico que se desprenden durante el lavado de fibras como el poliéster y el plástico desembocan en los océanos, mientras que alrededor del 85% de los textiles terminan en vertederos o son incinerados.

 

A raíz del fast fashion, Altmann también ha dicho que ahora hay hasta 52 micro-temporadas a lo largo del año y que los consumidores compran más prendas de vestir que en el 2000, pero cada producto se conserva la mitad de tiempo que entonces y, de media, el 40% nunca se utilizan.

 

Según datos de Unece, el 90% de la moda es transportada mediante contenedores, pero esta etapa tan solo representa el 4% de las emisiones de dióxido de carbono  de toda la industria. El 70% proviene de la producción, debido en gran parte al uso de fibras sintéticas procedentes del petróleo, mientras que otro 22% procede de los viajes de los consumidores para ir de shopping.