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La nueva feria alicantina de proveedores de calzado espera alcanzar el centenar de expositores

Modaes

4 jun 2014 - 17:24

La nueva feria española proveedores de calzado espera reunir un centenar de expositores en su estreno. El certamen, que se llamará Co-Shoes International Workshop, pretende encauzar el incremento de la demanda productiva de calzado en España de los últimos años, según ha explicado el secretario general de la Federación de Industrias del Calzado Español (Fice), Javier García-Lillo, a Modaes.es.

 

El evento se celebrará los días 22 y 23 de mayo en Elche (Alicante) y reunirá a empresas productoras de calzado españolas y extranjeras, tal y como adelantó Modaes.es. Co-Shoes, que hoy ha iniciado la comercialización de su espacio, se celebrará en paralelo a Futurmoda, el salón internacional de la piel, los componentes y la maquinaria para el calzado. Junto con Futurmoda, Co-Shoes quiere convertirse en el principal escaparate para la producción de calzado del sur de Europa.

 

El nuevo certamen quiere atraer la participación de empresas españolas y de otros enclaves productivos, tanto de Europa como del norte de África, Asia o Latinoamérica. Por otro lado, la feria no sólo se plantea como un espacio para encontrar fabricante, sino que también se abre a otras formas de colaboración, como licencias, alianzas para mejorar el know how en producción, distribución o exportación, entre otras.

 

La patronal española del calzado ha optado por Alicante para celebrar la feria por ser el principal clúster productivo del sector, al concentrar el 60% de la fabricación de calzado en España. El evento pone de relieve y en valor la producción para terceros, una parte del negocio de muchas empresas españolas de calzado, de la que hasta ahora se hablaba con mucha discreción.

 

Desde hace unos años, se ha producido un claro retorno de la producción del calzado en España, con el regreso de pedidos de marcas nacionales e internacionales que habían llevado su producción a Asia. La vuelta de parte de la producción que se había marchado a China responde a que el gigante asiático ha perdido competitividad en algunos aspectos clave como la distancia, el tamaño de los pedidos o la paridad euro-yuan, además del incremento de los costes laborales.