Denim by Premiere Vision vuelve a encumbrar a Barcelona como capital mundial de la moda vaquera

Pasillos llenos y stands atareados. Denim by Premiere Vision cerró ayer su primera jornada con el mismo buen sabor de boca que dejó tras su debut en Barcelona en mayo. La feria de la industria del denim repite en la capital catalana con el propósito de mantener las cifras récord de la pasada edición.

La directora de la feria, Chantal Malingrey-Perrin, prefiere no hacer previsiones, tan solo invita a observar el movimiento en pasillos y stands. Junto a la sala vip y de prensa, el gigante turco Orta cuenta con un stand de grandes dimensiones, lleno hasta la bandera, en el que incluso cuesta moverse. Es sólo un ejemplo, pero significativo.

Basta circular por el pasillo central para observar gente cerrando acuerdos y haciendo negocio. Mientras, la directiva sostiene los datos de un sector que cada sesenta segundos vende unos vaqueros. Malingrey-Perrin asegura que, en 2013, se vendieron en todo el mundo 1.800 millones de prendas vaqueras.

En el salón, los profesionales del sector hacen honor al negocio al que pertenecen y visten de riguroso denim. El dress code de la feria es claro y estricto, y no sólo para occidentales y japoneses hipster, sino también para árabes e hindúes. Aquí el negocio se hace enfundado en unos jeans.

En esta ocasión han asistido a la cita bianual del negocio del denim 98 empresas del sector. Como novedad, en esta edición se han incorporado al salón dos compañías españolas del sector: Rsp51, productor de tejido vaquero ubicado en la Colonia Prat de Puig-reig (Barcelona); e Iberlaser, fabricante catalán de tecnología láser. Tavex, representada a través de su sucursal marroquí, Tejidos Royo, Textil Santanderina y Jeanología  han repetido su asistencia al salón.

En la pasada edición, celebrada en mayo en Barcelona (la primera que la organización llevó a cabo en la capital catalana), Denim by Première Vision atrajo a 4.500 profesionales, un 72% procedentes de mercados internacionales. Ante la buena afluencia de visitantes del primer día, la organización confía en superar esta cifra, aunque no facilitan previsiones.

El 48% de los expositores que han acudido a esta nueva cita son fabricantes de tejido; un 22% son confeccionistas, lavadores y especialistas en acabados y un 20% fabricantes de accesorios. El 11% restante corresponde a productores de fibras e hiladores y proveedores de maquinaria, desarrolladores de tecnología y organismos de promoción.

En esta edición, el 60% de las empresas participantes proceden de Turquía, Italia y Marruecos. También tienen presencia en la feria empresas de Estados Unidos, India, Alemania, Japón, Francia y Hong Kong.

Continúan sin estar presentes los grandes gigantes asiáticos, los que producen a grandes volúmenes para abastecer, sobre todo, a su mercado local. En este sentido, la directora de la feria afirma que se han aplicado los mismos criterios de selección que en la edición anterior.