Opinión

Producción textil responsable

Gabriel Farías

22 sep 2016

 

La producción textil sustentable y su resultado final, un producto transparente desde el origen y amigable con el medio ambiente, se están convirtiendo en un valor central de las estrategias corporativas de las empresas textiles. Las nuevas generaciones de consumidores conscientes exigen un producto elaborado de manera sostenible y el sector textil está actuando sobre ello de manera fundamentada y transparente. El crecimiento actual y la relevancia futura de una marca textil dependen -y lo harán cada vez más-  de la capacidad que tenga la empresa para responder a estas nuevas exigencias de la tendencia de compra actual.

 

Con esta coyuntura y sus desafíos ya no hay lugar para que esto signifique solo una acción de marketing. La sostenibilidad es un principio rector que exige acción y procesos concretos a través de los cuales una empresa toma decisiones estratégicas para abordar la situación y generar un producto responsable y sostenible. A través de él  está fundamentando parte de su éxito futuro.

 

Transparencia en el origen y en el proceso

Para generar confianza en el consumidor se debe dotar al producto de transparencia respecto de su procedencia y sus procesos de elaboración.  Para lograr este objetivo los responsables de sourcing  necesitan estructurar una cadena de suministros  con trazabilidad total.  

 

Acompañando a las nuevas generaciones de consumidores, con la ayuda de la tecnología y el análisis de la data que ésta genera, la industria textil va sumando pasos hacia su meta de máxima visibilidad en su cadena de abastecimiento.

 

Sustentabilidad, objetivo central y compartido del modelo de negocio

Uno de los grandes desafíos que toda empresa enfrenta, cuando trata de cambiar su estructura funcional, es que las nuevas metas no siempre son compartidas por todas las áreas de la organización.  Actualmente, muchas marcas textiles cuentan con un equipo trabajando en la trazabilidad y la sostenibilidad de su cadena de suministros separado del resto de la organización. El objetivo central es que elaborar un producto final, responsable y sustentable, se constituya en una estrategia corporativa.

 

Esto implica que la empresa textil ha comenzado a enfocarse específicamente en la reducción de su impacto ambiental, trabajando a partir de un grupo central a través de las diferentes partes de su estructura con el objetivo de llegar a todos y cada uno de sus colaboradores y áreas. Lenta pero decididamente se suman más colaboradores a la discusión y se los integra al proyecto corporativo.

 

Materiales reciclados, fibras orgánicas y procesos sustentables.

Una de las incorporaciones actuales a la matriz productiva de las marcas de moda son las colecciones conscientes y sustentables. En ellas se revelan la utilización de tejidos y materiales reciclados, nuevas fibras de origen sostenible y se ha expandido la incorporación de fibras orgánicas, como el algodón orgánico certificado, en sus tejidos.  La elaboración de los modelos de estas colecciones es a través de procesos más respetuosos con el medioambiente. Implican, por ejemplo, la utilización de una menor cantidad de agua en su fabricación.

 

Compromiso con el cliente y también con el origen

Con un aprovisionamiento textil actual versátil y globalizado, sobre todo desde los mercados emergentes, es una obligación para las empresas su disposición y su compromiso para ser una fuerza disruptivamente positiva en las comunidades locales, allí donde se producen sus prendas, calzado y accesorios. Estas grandes organizaciones generan las diferencias y utilizan su influencia para reducir los impactos ambientales  de los procesos de fabricación, promover mejores condiciones de trabajo y respetar los derechos en toda su cadena de suministros.

 

Para establecer y garantizar las buenas prácticas dentro una política empresarial responsable las marcas han comenzado a publicar su lista de proveedores. En este sentido y para ampliar aún más la transparencia se han incluido las fábricas de materiales, accesorios y otras materias primas.

 

Conclusión

Lo que “la nueva generación de clientes conscientes” percibe cuando ingresa a una tienda y se dirige a los estantes donde se exhiben las prendas es algo más que ropa. Cada modelo es la garantía y la comprobación de lo que la empresa y su marca han generado para convertirse en una fuerza de cambio positiva para las comunidades locales que contribuyen a su éxito y lo que han hecho para preservar el planeta en el que vivimos.  

 

El acceso a la información, generada por un exponencial crecimiento de la tecnología, no tiene precedentes y, como resultado, cada persona es cada vez más consciente del efecto de nuestras acciones sobre el medio ambiente, tanto sean adversas como positivas. Los recursos de nuestro planeta no son infinitos y el reciclaje a nivel global, por ejemplo, ya no es una cuestión de prestigio, sino de necesidad.

 

La aceptación de la diversidad y la importancia de la inclusión se han convertido en los pilares de la estrategia empresarial y de la forma en que las compañías textiles se relacionan en el mundo promoviendo un ambiente de prácticas seguras y con conciencia social.

 

Una cadena de abastecimiento responsable y sustentable conducen a las marcas de la moda al éxito propio y al del planeta en el que habitamos.

 

¡Generar este valor es nuestra responsabilidad!

 

Gabriel Farías

Gabriel Farías

Gabriel Farías Iribarren -www.gabrielfariasiribarren.comes un profesional de la industria de la moda con una importante experiencia internacional en aprovisionamiento, compra y producción de textiles y accesorios en Latinoamérica, Europa, Asia y África. Gestor creativo y resolutivo, con enfoque estratégico y orientado a resultados, ha liderado importantes procesos de crecimiento empresarial y reducciones de costes. Autodidacta, muy curioso e inquieto desde muy temprana edad, ha combinado sus dos pasiones: el mundo corporativo y la moda.