Equipamiento

Una alianza hispano-francesa recupera la sastrería en Aragón tras el cierre de JGH Handmade

S. Riera

9 oct 2015 - 17:59

Savile Row vuelve a tener a su sastre en Aragón. En pocos meses, una inversión hispano-francesa ha recuperado el vacío dejado por el cierre de JGH Handmade, una empresa que había llegado a producir hasta 700 trajes al mes para un centenar de sastrerías españolas y algunas de las mejores en Londres, París, Los Ángeles y Pekín.

 

El empresario aragonés Jorge Loras y el francés, Jean Francois Pinson, crearon en julio la sociedad Inovip España y se hicieron con la unidad productiva de JGH Handmade, cuya solicitud de concurso finalmente no ha sido admitida a trámite. Con una inversión inicial de cerca de 200.000 euros, Inovip España ha puesto en marcha de nuevo las máquinas y ha vuelto a producir.

 

La empresa cuenta ya con una plantilla de 23 personas, que espera continuar ampliando en breve, y ha empezado a trabajar para clientes de España, Francia y Reino Unido. Una parte de la plantilla son antiguos trabajadores de JGH Handmade, mientras que la otra parte proceden de Cardenal Internacional, otra empresa del sector que también echó el cierre y que estaba especializada en la ceremonia de caballero, según han explicado fuentes del sector a Modaes.es.

 

Inovip España continúa centrada en la producción de sastrería a medida. De hecho, el socio francés es también propietario de la sastrería L’echoppe du Couturier, en Burdeos.

 

Por otro lado, uno de los socios de JGH Handmade, Juan Carlos Jiménez, también ha puesto en marcha la nueva sociedad Handmade Spain, para recuperar también parte del espacio dejado por la desaparición de su antiguo empresa.

 

JGH Handmade se fundó en 2011 de la mano de tres ex trabajadores de Suit Spain, un referente de la fabricación de trajes de sastre en Europa, liderada en su día por el sastre navarro Jaime Jaso Lizarbe. La crisis fue uno de los detonantes del cierre de Suit Spain en 2010, una empresa que llegó a producir hasta 250 prendas al día y llegó a contar con una plantilla de 168 trabajadores.

 

La también desaparecida JGH Handmade tenía entre sus clientes cinco establecimientos en el centro de París, cinco clientes más en Savile Row, un cliente en Los Ángeles y un personal shopper que, entre otros, se encargaba del vestuario de Los Angeles Clippers. La empresa llegó a tener también clientes en Pekín.