Equipamiento

La fiebre del probador virtual

C. Pareja

21 feb 2012 - 04:40

El smartphone se ha convertido en uno de los complementos indispensables para empresarios, jóvenes y fashionistas. Consultar catálogos de firmas, hacer compras desde el móvil  o localizar el punto de venta más cercano gracias a las herramientas de ubicación es ya posible gracias a las nuevas tecnologías. ¿Y si ahora también se pudiera saber cómo le quedará una prenda al usuario antes de comprarla? ¿Y si se pudieran crear infinitas combinaciones y realizar la compra desde el propio teléfono?

 

Todas estas opciones ya son posibles gracias a empresas como la sevillana MightyGate, que acaba de lanzar su primer probador virtual para smartphones. La compañía ha creado iDressing, un motor que podrá adherirse a cualquier aplicación que desee introducir un probador virtual en su oferta.

 

De esta forma, empresas como Inditex, Mango o Cortefiel podrían añadir a sus aplicaciones móviles un apartado de probador virtual, para que el usuario pueda crear las combinaciones pertinentes desde su teléfono con las prendas de cada cadena.

 

“La aplicación nace con la idea de un juego de recortables –explica Jose Manuel López, fundador de MightyGate-; la aplicación debe ser divertida, pero también debe reportar beneficios a la empresa, de este modo es una herramienta lúdica, pero también de negocio”.

 

Desde la compañía ya están inmersos en la comercialización de esta herramienta, que ha supuesto una inversión de 300.000 euros y seis meses de trabajo. Los clientes potenciales de esta aplicación, según MightyGate, serían cadenas como “Blanco, Stradivarius o Zara, por nombrar algunas, ya que todas las empresas de moda que tengan una aplicación pueden beneficiarse de esta herramienta”.

 

En paralelo, el lujo también necesita probadores virtuales para potenciar sus venta por el canal online. Fits.me es un útil creado para empresas que vendan moda hecha a medida. Ermenegildo Zegna, por ejemplo, es una de las marcas que ya han incorporado este aplicativo a sus tiendas en línea.

 

La compañía, con sede en Estonia, quiere reducir el índice de retorno de prendas compradas por Internet, así como aumentar las ventas de las empresas de moda que trabajen con ellos. Desde Fits.me creen que “si el usuario puede hacerse su prenda a medida, en el caso de la sastrería masculina, podrá experimentar una situación mucho más próxima a la forma de comprar más tradicional”.

 

Aunque no todo son probadores virtuales, ya que también, y cada vez más, proliferan en la Red los personal shopper virtuales, que mediante una serie de ítems y preferencias del consumidor, el motor de búsqueda es capaz de aconsejar, buscar y ofrecer las prendas que mejor se adaptan a los gustos del usuario.

 

El Instituto Tecnológico Aido, junto a la empresa Onestic, acaban de crear iFashion, una aplicación que permitirá asesorar al usuario durante el proceso de compra online. Próximamente, la empresa lanzará la primera versión de este asesor virtual, que si bien está pensado para el sector de la moda, complementos y belleza, también será fácilmente adaptable a otros sectores, como la música, el cine o el deporte.