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Javier Valero (Celeritas): “La revolución en la logística está en los vehículos autónomos”

El directivo está al frente de la empresa de transporte desde 2012, cuando la adquirió Sgel (Sociedad General Española de Librería).

S. Riera

6 jun 2017 - 04:39

 

Javier Valero es director general de Celeritas. Valero tomó las riendas de la empresa de operaciones de logística y transporte en 2012 tras adquirirla Sgel (Sociedad General Española de Librería). El directivo procedía precisamente de Sgel, donde había desarrollado hasta entonces gran parte de su trayectoria profesional. Celeritas, fundada en 2006, cuenta entre sus clientes con Amazon, Zalando, El Corte Inglés, Kiabi Avon, entre otros.

 

Pregunta.: ¿El transporte se ha vuelto estratégico para el ecommerce?

Respuesta: Si, no solo el transporte, toda la operación logística, muestra de ello es que ya hay escasez de suelo logístico en Barcelona y Madrid para este tipo de operaciones logísticas

 

P.: ¿Cuál es el principal cambio que ha traído el ecommerce?

R.: Vemos que en industrias donde no había mucha venta online, que hasta ahora no se habían preocupado por ello, empiezan a tener interés y a incorporarlo.

 

P.: ¿Y qué impacto tiene sobre la logística?

R.: Estas empresas nos preguntan ahora cómo podemos ayudarles a vender online. Y la mayoría de las empresas de logística y transporte tienen estructuras B2B que no sirven para el B2C, e intentan llegar al consumidor sin tener que cambiar toda la logística. Deben pasar de preparar palés para tiendas a preparar pedidos para consumidores.

 

 

P.: ¿La moda ha sido pionera?

R.: Sí, porque parte de que el cliente es lo primero y, por ello, es el sector que lleva ventaja. Ahora está cogiendo carrerilla el mueble y últimamente va cogiendo fuerza el lanzamiento del más esperado, la alimentación, aunque no termina de despegar.

 

P.: ¿Habrá que acostumbrarse a picos de consumo, como el Black Friday?

R.: El principal problema del Black Friday es que, a todos aquellos que ya venden online, se suman muchos otros y la oferta de transporte y de capacidad logística no es capaz de cubrir la demanda. Es importante que el sector sea capaz de dimensionarse para actuar sobre una demanda que se multiplica por diez. El año pasado, la industria y el transporte sufrió mucho.

 

P.: ¿Estará el sector preparado para este año?

R.: Ya veremos si en el próximo Black Friday se ha invertido lo suficiente para cubrir las necesidades. Veo otra temporada complicada.

 

P.: ¿Irá entonces a más?

R.: Es todo muy nuevo y tiene mucha fuerza. Las tendencias marcan un crecimiento del 1% en retail y en el ecommerce a doble dígito, por encima del 15%, en escenarios prudentes en España.

 

 

P.: ¿Cómo reacciona el sector logístico antes estas perspectivas?

R.: Hay dos tendencias. Por un lado, las empresas logísticas que exponen ya sus límites a sus clientes, y por otro lado, las que están invirtiendo en incrementar su capacidad. Es raro que los grandes no estén preparando enormes desarrollos operativos, planes para desarrollar redes, etc.

 

P.: ¿No hay tercera vía…?

R.: Siempre se pueden buscar soluciones más eficientes.

 

P.: ¿Cómo?

R.: No es lo mismo entregar cien paquetes domicilio a domicilio que cinco veces veinte paquetes en puntos de conveniencia, por ejemplo. Pero esto implica cambiar las reglas. Las entregas en puntos de conveniencia irán en aumento. Hace cinco años eran el 1% y actualmente son el 10%, pero en mercados más maduros, como el alemán o el británico, superan el 40%.

 

P.: ¿La velocidad es clave en este negocio?

R.: No todos los consumidores requieren entregas inmediatas, pero lo que sí quieren todos es que la promesa de entrega se cumpla. No todos quieren entregas en dos horas, son un porcentaje de en torno al 15% y el 20% que están dispuestos a pagar más por un transporte premium. A medida que el mercado madura, se acorta. Ya nadie compra a cinco días, por ejemplo.

 

 

P.: Si hasta un 20% está dispuesto a pagar los portes, ¿qué ocurre con el 80% restante?

R.: El transporte no es gratis. De cara al consumidor puede parecerlo, pero no lo es. Las marcas pueden restarle el coste al consumidor, pero esto no significa que no esté.

 

P.: ¿La tecnología está ayudando para abaratar costes y ganar velocidad?

R.: Para poder jugar en el mercado de la logística para ecommerce se debe ser muy tecnológico, sobre todo porque nuestros socios lo son. La tecnología que se está integrando ahora pone el foco en el consumidor final.

 

P.: ¿De qué tipo de tecnología se trata?

R.: El consumidor pide sobre todo mucha información. Con la tecnología se puede conseguir reducir ineficiencias del transporte. Si se le da más posibilidades al consumidor de interactuar con el transportista hace que los errores de entregas de última milla se eliminen. Y todos estamos detrás de esta tecnología, de geolocalización y geoposicionamiento, para ser más eficientes y reducir el gap de la última milla. Ir cinco veces a un domicilio no es rentable.

 

P.: ¿Llegarán las entregas con drones?

R.: Hace un año era mucho más escéptico que ahora. Pienso que tendrán su hueco, seguro que habrán casas fuera de las grandes ciudades y en zonas alejadas de difícil acceso para los que será útil… Pero donde creo que hay una revolución es en los vehículos autónomos.

 

 

P.: ¿Por qué?

R.: Hay un montón de empresas interesadas en desarrollar entregas sin conductor. Todavía está verde, hay pruebas piloto, pero lo veremos.

 

P.: ¿Cómo serán entonces las plantillas, menos transportistas y más ingenieros?

R.: El foco de captación de capital humano empieza a ser menos tradicional en cuestiones como los estudios hacia otro más multidisciplinar con creatividad, capacidad de relacionarse, de traer ideas nuevas… Va todo tan rápido que exige dar soluciones también rápidas para poder adaptarnos.

 

P.: ¿Podría darnos un ejemplo de esta adaptación?

 R.: Los buzones automáticos o lockers, por ejemplo. Hace unos años no existían y ahora han empezado a implantarse en las ciudades. Son una buena solución para resolver el problema de las franjas horarias en las entregas y las recogidas.