Gratacós acelera en su expansión internacional y desembarca en Oriente Medio y África

Gratacós impulsa su negocio internacional. La compañía, que produce tejidos de gama alta, ha empezado a distribuir sus colecciones en países emergentes de Oriente Medio y África. La empresa catalana, cuyos orígenes se remontan a 1940, ha entrado en Emiratos Árabes, Qatar, Kuwait y Arabia Saudí, así como en Sudáfrica, Nigeria y Marruecos, según ha explicado Juan Gratacós, director general de la empresa, a Modaes.es.

 

La compañía, entre cuyos clientes se encuentran Armani, Chanel, Valentino, además de Desigual, El Corte Inglés o Adolfo Domínguez, concluyó 2013 con una cifra de negocio de once millones de euros. En la actualidad, la empresa cuenta con una plantilla de 40 personas. Gratacós tiene tres centros de producción en Italia, India y Corea del Sur, además de un centro logístico en Granollers (Barcelona).

 

Gratacós se abre paso ahora en economías emergentes, donde encuentra una menor competencia y una manera de trabajar diferente y afín con su modelo de negocio. “A diferencia de lo que ocurre en Occidente, en estos países nuestros clientes no son confeccionistas sino mayoristas, que buscan pocas cantidades de un gran número de diseños”, asegura el empresario. “Es más difícil de producir, pero los márgenes son mejores”, señala Juan Gratacós.

 

En los últimos años, la empresa ha pisado el acelerador en su estrategia de internacionalización. “Hace unos años atrás, España representaba el 70% de las ventas de Gratacós y ahora es sólo el 30%”, explica el empresario.

 

“En poco más de dos años, hemos dado un vuelco a la situación, pero es que si no lo hubiésemos hecho, estaríamos en la ruina”, señala Gratacós, representante de la tercera generación de esta compañía familiar. En la actualidad, la empresa comercializa sus tejidos en los cinco continentes.

 

Más de la mitad de las exportaciones de Gratacós tienen ya como destino países de fuera de la Unión Europea. Estados Unidos, por ejemplo, es ya el segundo mercado de la empresa después del español. La compañía cuenta con oficinas propias en Nueva York. Entre sus clientes estadounidenses se encuentran Anna Sui o Carmen Marc Valvo, entre otros. En la actualidad, Estados Unidos genera el 10% de la cifra de negocio de Gratacós.

 

La empresa tiene también oficina en Shanghai, desde la que cubre el mercado chino. “El confeccionista china que quiere desmarcarse del resto, busca producto europeo”, afirma el empresario. Gratacós tiene previsto continuar su expansión en Asia y ha empezado a tantear otros mercados de la región del sudeste, como Indonesia y Malasia.

 

En Europa, Reino Unido y Alemania tiran del crecimiento de Gratacós, mientras que Francia e Italia se han convertido en sus mercados más difíciles. “En Francia e Italia es donde está toda nuestra competencia”, recuerda el empresario.

 

Con el propósito de dar un nuevo impulso a su crecimiento internacional, la compañía tiene previsto poner en marcha una tienda online para comercializar sus tejidos. La compañía empezará a distribuir sus colecciones a través de Internet para poder abrirse a un mayor número de clientes.

 

El negocio online estará abierto también al consumidor final y no establecerá mínimos en los pedidos. La tienda online de Gratacós empezará a funcionar después del verano. A través de la Red, la empresa también distribuirá accesorios.

 

Hace un par de años, la empresa separó el negocio de la venta al detalle, que genera su establecimiento en el Paseo de Gracia de Barcelona, de la venta al confeccionista. Las oficinas que durante siete décadas estuvieron sobre el emblemático comercio se trasladaron a unas nuevas instalaciones en la calle Córcega de la capital catalana.