Entorno

Uruguay, eje estratégico en el cono Sur

Uruguay es cinco veces mayor que Holanda, pero cinco veces menos poblada. Esta baja densidad de población ha sido, según los economistas, clave para el desarrollo económico del país.

I. P. G.

14 ene 2019 - 00:00

Uruguay, eje estratégico en el cono Sur

 

 

Pese a su reducido tamaño, Uruguay se ha convertido en un enclave estratégico en el Cono Sur. El país es uno de los más libres y estables de Latinoamérica, y su capital, Montevideo, alberga la sede de Mercosur. El comercio internacional es, de hecho, uno de sus principales motores, gracias a su pertenencia al acuerdo de libre comercio, su ubicación estratégica, entre Argentina y Brasil, y su puerto franco.

 

Tras un periodo de recesión a finales de la década de los noventa, Uruguay recuperó el impulso y logró incluso esquivar la crisis, aunque la desaceleración de sus socios de Mercosur ha impactado en sus tasas de crecimiento en el último lustro. En 2017, la economía uruguaya creció un 2,7%, y las previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI) pasan por que el país crezca otro 2% en 2018 y un 3,2% en 2019.

 

 

Un hueco en el sector de la moda

A diferencia de otros vecinos de Latinoamérica, Uruguay carece de industria textil y de la confección, más allá de pequeños talleres artesanales. Sin embargo, el país ha visto nacer grupos de distribución de moda con relevancia en la región como Lolita, fundada en 1960 y con presencia en Chile, Perú y Ecuador. Daniel Cassin, Jean Vernier o la diseñadora Caro Criado son otros de los actores relevantes del negocio uruguayo de la moda.

 

El retail se concentra principalmente en centros comerciales, aunque el ecommerce está creciendo con fuerza, a tasas anuales del 25%. Para capitalizar este crecimiento, en 2017 cinco emprendedores pusieron en marcha Demi Store, una plataforma de ecommerce que distribuye más de treinta marcas uruguayas de moda.

 

 

 

 

Puerta de entrada a Mercosur

Inditex, Gap y, desde 2018, H&M. Uruguay ha atraído a los gigantes de la moda internacional, que a menudo han visto en el país, más abierto a la inversión extranjera que Argentina y Brasil, una puerta de entrada a la región de Mercosur. Otro de sus atractivos es su amplia clase media: el país cuenta con un PIB per cápita de 23.266 dólares, de los más altos de la región, y es uno de los más equitativos del continente.

 

H&M ha sido el último gran operador en aterrizar en el país, con la apertura de una tienda en Montevideo el pasado octubre. Inditex, por su parte, cuenta con tres tiendas en el país y Gap, con dos. Fuera de la capital, el retail se concentra en Punta del Este, uno de los principales destinos turísticos de la región, donde operan grupos de lujo como Louis Vuitton o CH Carolina Herrera.

 

 

Dictadura, bipartidismo y auge de la izquierda

Tras ser colonizada por los españoles y anexionada brevemente a Brasil, Uruguay se independizó en 1828. Durante el siglo XX, el país se convirtió en una de las sociedades más progresistas de Latinoamérica, gracias al avance en políticas sociales y una relativamente amplia clase media. Sin embargo, este periodo de desarrollo se vio interrumpido por la dictadura militar impuesta entre 1973 y 1985.

 

Tras la restauración de la democracia, el Gobierno ha estado dominado por los denominados partidos tradicionales, el Partido Nacional (o Partido Blanco) y el Partido Colorado, ambos de centroderecha. El bipartidismo terminó en 1971, cuando se fundó la coalición de izquierda Frente Amplio, que llegó por primera vez al poder en 2004 con Tabaré Vázquez como presidente.

 

Desde entonces, el partido ha vuelto a revalidar su victoria en dos ocasiones: con José Mújica, presidente entre 2010 y 2015, y de nuevo con Vázquez, en el cargo desde hace tres años. Aunque su democracia es joven, el país es políticamente estable y es considerado uno de los más pacíficos de Latinoamérica.