Entorno

Turquía, el ganador de la relocalización se reafirma como la fábrica de Europa

Con una posición privilegiada, puerta de entrada entre Oriente y Occidente, Turquía ha capitalizado la relocalización de la industria textil tras el golpe de la pandemia. El país es ya el segundo mayor proveedor de la industria española de la moda. 

C. Juárez

28 mar 2022 - 04:51

Turquía, el ganador de la relocalización se reafirma como la fábrica de Europa

 

 

Redefinir el sourcing tras la pandemia se ha convertido en unos de los principales retos de la industria de la moda ante la urgencia de la sostenibilidad y la necesidad de diversificar riesgos y tejer relaciones más sólidas con los proveedores. En este nuevo Insight, patrocinado por Lectra, Modaes.es repasa las claves de la cadena de aprovisionamiento de la moda a escala global y aborda la situación de los principales hubs de producción del sector y las materias primas.

 

 

Músculo industrial, velocidad, flexibilidad y, sobre todo, proximidad. Estas son algunas de las ventajas de la industria textil y de la confección de Turquía, que ha resultado claro ganador tras el estallido de la pandemia y la tendencia de las compañías de moda hacia la relocalización del aprovisionamiento en cercanía.

 

Turquía cuenta con una posición privilegiada en términos logísticos: es la puerta de entrada de Asia a los países europeos. Además, el país ha modernizado su industria textil y de la confección con la introducción de nueva tecnología y cuenta con una mano de obra altamente cualificada. El salario mínimo en Turquía es de 328,5 euros.

 

El país también cuenta con una estructura verticalizada: es el séptimo mayor productor de algodón (y uno de los mayores proveedores de algodón orgánico), fabrica hilos y tenidos. El sector emplea a alrededor de 1,67 millones de personas en todo el país y representa el 10,1% de las exportaciones turcas, según datos de la Asociación de Prendas de Vestir de Estambil (Ihkib). El país es el tercer mayor proveedor de moda a la Unión Europea.

 

 

 

 

La apuesta por Turquía de los principales grupos de moda en Europa hizo que las exportaciones textiles del país sólo se redujeran un 1% en 2020, el año del estallido de la pandemia. Las ventas al exterior de prendas, por su parte, sólo se redujeron un 6%, según datos de Turkish Statistical Institute.

 

En 2021, Turquía ha adelantado a Bangladesh en el ránking de mayores proveedores para la moda española y copa ya el 10% del total de las importaciones. El año pasado, España compró a Turquía bienes de moda por valor de 2.847 millones, frente a los 2.776 millones de Bangladesh, según datos de Icex España Exportación e Inversiones.

 

Inditex cuenta en Turquía con 174 proveedores y 1.790 fábricas, concentrando el 9,7% de su sourcing en el país en 2021. Turquía también es el segundo mayor proveedor para Mango, donde trabaja con 210 de sus mil proveedores.

 

 

 

 

 

El país también se ha convertido en el favorito para Estados Unidos, que ha disparado sus compras de moda a Turquía un 62% en 2021, hasta 862,1 millones de dólares, colocándose como octavo mayor proveedor de moda para el país norteamericano, según datos de la Office of Textiles and Apparel (Otexa).

 

En total, las exportaciones turcas del textil se dispararon un 30% en 2021, y superaron claramente los niveles previos a la pandemia, situándose un 29% por encima de 2019. Las ventas al exterior de prendas de vestir, por su parte, se incrementaron un 22% en el último año, y registraron una subida del 14% respecto a antes del estallido de la pandemia.

 

Sin embargo, el país se enfrenta actualmente a una inflación galopante. En enero, el Índice de Precios de Consumo (IPC) del país se disparó un 48,6%, mientras que la lira ha sufrido una depreciación de su valor del 45% en el último año. El 23 de marzo, la lira estaba a 0,61 euros.

 

 

 

 

Pese a ser una mala coyuntura para el país, esta situación reafirma la posición privilegiada de Turquía en el aprovisionamiento de moda: los operadores internacionales de moda pueden comprar lo mismo a menor precio.

 

Para preservar esa posición de liderazgo, Turquía ha puesto en marcha un plan para impulsar la sostenibilidad en la industria textil. La asociación Turkish Textile Industry estableció el pasado verano la estrategia Plan de Acción de Sostenibilidad que incluye pasos firmes en la gestión de residuos cero, el reciclaje de materiales, la gestión del agua, la eficiencia energética y la economía circular.