Entorno

Sudáfrica, nuevo diamante en bruto para el ‘fast fashion’ con un mercado de 13.400 millones en 2014

S. Riera

21 oct 2015 - 04:55

 

Sudáfrica se perfila con un nuevo diamante en bruto para el negocio del retail. H&M acaba de desembarcar en este mercado siguiendo los pasos de MangoInditex, Topshop y Forever 21. Los gigantes del retail van tomando posiciones en uno de los países africanos con mayores perspectivas de crecimiento del consumo. En los últimos quince años, Sudáfrica ha multiplicado por 25 el tamaño de su mercado de retail, pasando de 8.000 millones de rands (536 millones de euros) en 2001 a 200.000 millones de rands (13.400 millones de euros) en 2014.

 

El mercado sudafricano es además el que más aprecia el consumo de moda y calzado de todo el continente, según un estudio de la Universidad de Sudáfrica. Se calcula que los hogares sudafricanos destinaron en 2014 una media de 582 rands (39 euros) al mes a la compra de artículos de moda y calzado, el equivalente al 5,3% de su presupuesto familiar mensual. En educación el gasto medio mensual es de 373 rands (25 euros).

 

Sudáfrica es una de las economías emergentes que, igual que otros países del continente, cuenta con abundantes recursos naturales, pero que además tiene un sistema financiero desarrollado, un marco legal seguro, infraestructuras y fuentes energéticas. No obstante, en los últimos años, su Producto Interior Bruto (PIB) ha ido disminuyendo, hasta marcar un crecimiento del 1,5% en 2014. Las últimas previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI) van en la misma línea y prevén un alza del 1,4% en 2015 y del 1,3% en 2016. El desempleo roza el 25% de la población activa y perjudica sobre todo a los jóvenes negros.

 

En los últimos años, Sudáfrica se ha coronado como uno de los destinos más atractivos para el fast fashion en el continente africano. Zara fue una de las primeras marcas internacionales en desembarcar en el país hace cuatro años y, en la actualidad, opera en él a través de seis establecimientos. Los últimos en entrar en el país han sido la australiana Cotton On, la británica Top Shop, la estadounidense Forever 21 y la sueca H&M.

 

No obstante, los gigantes internacionales del sector compiten con grupos locales, como Foschini, que cuentan con una fuerte presencia en el país y, además, pueden jugar mejor las cartas de la rapidez en la rotación de las colecciones, ya que trabajan con proveedores cercanos. Se estima que algunas de las fábricas del país pueden proveer de mercancía nueva a las tiendas en 32 días y que el tiempo medio se sitúa en 42 días.

 

De hecho, los expertos señalan que el Gobierno del país debería apoyar a la industria local para que los retailers sudafricanos pudieran ganar en velocidad a los internacionales. A pesar de que la producción en Sudáfrica también ha sufrido en las últimas décadas la deslocalización hacia China, el país está recuperando pulso en este sentido.

 

En mayo de 2015, la industria textil, de la confección y del calzado en Sudáfrica contaba con 88.657 trabajadores, un 1,45% más que un año atrás. No obstante, la cifra queda aún lejos de la cota alcanzada en 1996 de 228.000 empleados en el sector. En la actualidad, el país cuenta con 900 fábricas dedicadas sólo a la confección.

 

Principales vías comerciales del país

 

H&M aterrizó el lunes en el mercado sudafricano con una primera macrotienda en el centro comercial Victoria&Alfred Waterfront, en Ciudad del Cabo, el lugar más caro del país, según el último informe Main Streets Across the World, de la consultora inmobiliaria Cushman & Wakefield. Calvin Klein, Cotton On, Nike, Scoth&Soda o Tiger of Sweden son algunas de las marcas internacionales que también operan en él.

 

Mango fue una de las primera marcas internacionales en abrir una tienda en Sudáfrica en 2006 y actualmente cuenta con 44 establecimientos en el país. La marca tiene previsto abrir un nuevo punto de venta en el Mall of África de Johannesburgo a mediados del 2016. Además, la enseña está presente en cinco de los centros comerciales más importantes del país: Sandton en Johannesburgo, Victoria&Alfred Waterfront en Ciudad del Cabo, Eastgate en Johannesburgo, Clearwater en Johannesburgo y Menlyn Park en Pretoria.

 

Otros de los enclaves comerciales estratégicos en el país son los centros comerciales Sandton City, en Johannesburgo; The Pavillion, en Durban, y Menlyn Park, en Pretoria.

 

La principal vía para entrar en el país es a través de un socio franquiciador local, como Edcon, The Surtee Group o Busby, entre otros. Muchos de ellos cuentan ya con las licencias de distribución en Sudáfrica de marcas internacionales. No obstante, operadores como Zara han entrado en el país de manera directa, sin necesidad de intermediarios, según el estudio How global is the business of retail?, de CBRE.

 

Para los retailers internacionales, Sudáfrica se perfila como el mercado africano con mayores perspectivas de crecimiento para el consumo, por encima de otros países del continente como Nigeria, Kenia y Etiopía.