Retrato de la moda en la cuna española del textil: 1.300 empresas que generan el 7,5% del PIB catalán

De las colonias textiles del siglo XIX a un negocio dominado por el retail, que genera el 7,5% del Producto Interior Bruto (PIB) de Cataluña. El negocio de la moda en Cataluña ha dado un vuelco en los últimos años. Las últimas crisis han obligado a transformar un sector, que en la actualidad lo componen 1.290 empresas, que generan una facturación agrupada de 15.351 millones de euros y emplean a más de 60.000 trabajadores, según el Estudio de caracterización del sector textil moda de Cataluña, que ha elaborado la agrupación empresarial Actm.

La actividad de la moda en esta comunidad autónoma le reporta el 7,54% de su PIB. Por volumen de negocio, la moda es el segundo sector industrial, por detrás de la automoción, con mayor peso en el PIB catalán, según el estudio. La industria de la moda está formada por empresas textiles, de moda, calzado, marroquinería, joyería, accesorios y servicios.

La radiografía de la cadena de valor de la industria textil y de la moda hoy apenas guarda similitud con la de quince años atrás. El nuevo retrato del tejido empresarial del sector incorpora nuevos actores, como los gestores de la producción, y por primera vez da el salto a la distribución añadiendo a los retailers.

De hecho, el estudio señala como las empresas con mayores oportunidades de crecimiento en los próximos años aquellas que están orientadas al comercio y a las que gestionan el diseño y la producción para terceros. Las marcas y el retail suman en Cataluña el 27% de las empresas, pero, en cambio, generan el 72% del total del volumen de negocio.

Las marcas que no tienen establecimientos propios o en franquicia representan el 15% en número de compañías, pero tan solo el 5% en facturación. El multimarca tiene un comportamiento similar. El comercio independiente cuenta con el 10% del total de empresas del sector, pero genera el 4% de sus ventas. Por último, el tejido productivo suma el 41% de las sociedades, pero la cifra de negocio es del 18% sobre el total.

Las compañías de gran distribución con sede en Cataluña facturaron en 2011 un total de 6.680 millones de euros y registraron un crecimiento del 24,6% desde 2006. En el periodo 2006-2011, el negocio que creció más en términos absolutos fue el ecommerce, que incrementó sus ventas un 51,9%, hasta 150 millones de euros.

Relocalización

La confección fue otra de las actividades que registró un mayor crecimiento entre 2006 y 2011. En este periodo, los talleres de confección de prendas aumentaron su facturación un 15,16%, hasta cincuenta millones de euros. Este repunte de la actividad confeccionista es significativa, pero no lo suficientemente representativa para confirmar la consolidación del fenómeno del retorno de la producción.

“Tienen que pasar al menos un par de años más para poder hablar con perspectiva, todavía es demasiado pronto”, aseguró la presidenta de Actm, Roser Ramos. La empresaria señaló que sí se observa un interés creciente en volver a producir en Cataluña, en localidades como Igualada o Mataró, que canalizan los talleres que ya existen. Sin embargo, matizó que todavía no existe un retorno suficiente para que se creen nuevas empresas.

Otro de los retos que tiene el regreso de la producción es la falta de formación para perfiles técnicos. La desaparición del tejido industrial en Cataluña a raíz del traslado de la producción a países con costes laborales más bajos arrastró consigo las titulaciones técnicas.

Según Ramos, las empresas han empezado a demandar perfiles profesionales que ahora son difíciles de encontrar y que, en muchos casos, se soluciona a través de la formación interna. “Los mayores están formando a los jóvenes dentro de la empresa”, aseguró la presidenta de Actm.