Entorno

¿Quién dice lo que vale la moda? Dentro de la cocina del IPC

El Instituto Nacional de Estadística analiza cada año cuáles son los comercios donde más compran los españoles de cada ámbito geográfico para determinar cuándo se encarece o se abarata la moda.

Iria P. Gestal

5 jun 2020 - 04:51

¿Quién dice lo que vale la moda? Dentro de la cocina del IPC

 

 

¿Cuánto cuesta un pantalón vaquero? En Primark, ocho euros. En Levi’s, cien. En J Brand, doscientos. La moda se ha desmarcado en los últimos años del incremento del coste de la vida: por un lado, el sector se ha sumido en una espiral de descuentos y promociones; por otro, la entrada de operadores low cost ha cambiado para siempre los precios de la ropa en el imaginario del consumidor. Es difícil decir hoy cuánto cuestan unos jeans, pero sí se puede asegurar si son más caros o más baratos que el año pasado. Lo dice, puntualmente cada mes, el Instituto Nacional de Estadística (INE). Pero, ¿cómo lo calcula? ¿Compra en H&M o en Diesel? ¿Compra pitillos o campana? ¿En febrero o en el Black Friday?

 

El Índice de Precios al Consumo (IPC) es, junto con el Producto Interior Bruto (PIB) y la Encuesta de Población Activa (EPA), uno de los indicadores más relevantes de los que elabora el INE. En base a él se calculan muchos salarios y las pensiones, y se mide la evolución real (descontando el crecimiento de precios) de muchas estadísticas. Controlar la inflación es uno de los principales objetivos del Banco Central Europeo, y de ella dependen gran parte de las políticas monetarias del continente.

 

 

 

 

El índice se elabora en base a la cesta de la compra media de las familias españolas, ponderando cada artículo en base a la Encuesta de Presupuestos Familiares. Vestido y calzado tienen un peso del 6,49%, lo que la convierte en la sexta categoría más importante del índice.

 

Con la lista en la mano, el INE selecciona los comercios, y se va de compras. Los comercios se deciden según la misma Encuesta de Presupuestos, que analiza también dónde compran cada producto los españoles, aunque esa lista no se hace pública. El análisis se realiza en las zonas comerciales de una muestra de 177 municipios.

 

La mayoría de datos se recogen directamente en las tiendas, aunque también se obtienen otros por teléfono, fax y correo electrónico, o bien por scanner data, a partir de las bases de datos de las empresas.

 

 

 

 

Pero ¿qué ocurre si los españoles pasan de comprar en El Corte Inglés a, por ejemplo, Primark? ¿Podrían bajar los precios sólo por la entrada de un nuevo operador más barato? La respuesta es no. El INE mide la variación, nunca el valor absoluto, y siempre compra el mismo producto, en el mismo establecimiento y en la misma época del año.

 

Si, por ejemplo, abre un nuevo Primark en Burgos y se convierte en uno de los comercios con más ventas de moda de la ciudad, el INE esperaría un año para incluirlo en su muestra de comercios, para que haya datos comparables.

 

Entonces, los encuestadores comparan el precio de un artículo en Primark en mayo de este año respecto al mismo mes del año anterior y respecto al mes anterior. Da igual que el pantalón analizado cueste diez o cien euros, lo que importa es cuánto se haya encarecido, en esa misma tienda, respecto al año anterior. La lista de comercios se actualiza cada año, y de forma más exhaustiva cada cinco.

 

Lo importante, subrayan desde el INE, es la estabilidad. Pero en moda, es raro que un producto esté un año, y al siguiente, y al siguiente en la misma tienda. Entonces, el INE aplica lo que llama “un ajuste de calidad”. “Si este año se llevan los pantalones campana y el año que viene los pitillo, no se pueden comparar”, explican desde el organismo.

 

“Entonces, se coge lo más comparable: un cinco bolsillos, azul, vaquero…”.  Cuanta mayor sea la frecuencia de variación y mayor sea la ponderación de ese artículo, más productos se compran.

 

Lo mismo se replica en todas las categorías de producto: sanidad, vivienda, alimentación, transporte, menaje… En total, el INE analiza 220.000 precios cada mes, en 33.000 tiendas y 177 municipios. El resultado es el IPC.