Patronal y sindicatos abren la negociación del próximo convenio colectivo del textil

Patronal y sindicatos dan el primer paso en la negociación del próximo convenio colectivo. Representantes de empresarios y trabajadores ya han puesto fecha para iniciar una nueva etapa de conversaciones, después de que el último convenio se aprobase en un clima de fuerte tensión en el seno de la patronal, que terminó con la escisión del Consejo Intertextil Español (CIE).

 

Está previsto que el próximo 17 de diciembre ambas partes constituyan la nueva mesa de negociación. En esta ocasión, la patronal contará con dos portavoces, uno para el textil de cabecera, representado por el CIE, y otro para el producto acabado, representado por la Federación Española de la Confección (Fedecon) y la Agrupación Española del Género de Punto (Aegp).

 

A pesar de la división, las dos partes se presentarán bajo una plataforma común. Sin embargo, la constitución de la nueva mesa de negociación se realizará con la participación de los representantes del producto acabado al mismo nivel y en igual de condiciones que sus homólogos del CIE. En este sentido, Fedecon y Aegp logran una de sus reivindicaciones, que era la de tener un mayor peso en la negociación.

 

Las agrupaciones empresariales de la confección y el punto se negaron a firmar el acuerdo tras desmarcarse de las negociaciones desde un inicio. Ambas asociaciones empresariales, que representan al conjunto de la prenda acabada, no aceptaron la constitución de la mesa de negociación porque no tomaba en cuenta su representación dentro del sector textil-confección.

 

En la actualidad, tanto la patronal como los sindicatos tienen interés en acelerar la negociación del nuevo convenio colectivo, después de aprobar in extremis el de 2014. A finales de mayo entró en vigor el último convenio, que no firmaron ni Fedecon ni Aegp, y que es una prórroga del documento del año anterior.

 

La única novedad que incorporó el nuevo fue un incremento salarial del 0,4% para 2014. Fedecon y Aegp decidieron abandonar el CIE la misma tarde de la firma del convenio por considerar que la patronal del sector no tuvo en cuenta sus reclamaciones a la hora de pactar con los sindicatos.