Los precios de la moda siguen escalando y marcan su mayor subida en un año

Los precios del vestido y el calzado continúan acelerando. En marzo, el Índice de Precios de Consumo (IPC) del sector subió un 1,1%, una décima más que el año anterior y su máximo en un año, según datos publicados hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

El rebote fue todavía mayor en el IPC general, que después de cerrar un febrero sin variación se situó en el 1,3% en marzo, su máximo desde abril de 2019. Los precios que han influido en el incremento de la tasa anual son el transporte, cuya variación se ha incrementado en cinco puntos, hasta el 3,8%, y la vivienda, con una tasa del 4,3%, casi cinco puntos más.

En el sector de la moda, la categoría que más contribuyó a la subida del IPC fue las prendas de vestir para bebés y niños, que pasó de elevar sus precios un 1% en febrero a un 1,3% en marzo. El IPC de las prendas de vestir para hombre y el calzado para hombre, mujer y niño se incrementó en 0,1 puntos en cada caso.

Con todo, el grupo más inflacionista del sector continúa siendo la limpieza de artículos de vestir, con una subida de precios del 2,5% en marzo. Le siguen los artículos de mercería, con un 1,8%, y el calzado para bebé y niño, con un 1,5%.

Durante el año pasado, la moda se desmarcó de la caída generalizada de precios gracias al impulso de la limpieza de artículos de vestir y la reparación de calzado. El IPC del vestido y el calzado cerró el año en el 0,9%, en línea con el cierre de 2019.

El IPC general, en cambio, se mantuvo en tasas negativas durante buena parte de 2020 y cerró diciembre con un descenso del 0,5%, encadenando nueve meses de bajadas. El indicador volvió a repuntar en enero, con un 0,5%, y cerró febrero en plano.

El IPC es un indicador coyuntural que mide la evolución de los precios de los bienes y servicios de consumo adquiridos por los hogares residentes en España. El indicador, con base 2016, se elabora mensualmente a partir de la observación de alrededor 220.000 precios mensuales.