Entorno

Los españoles vuelven a pagar más por la moda: el precio medio sube un 1,1% y el ‘low cost’ pierde terreno

Iria P. Gestal

21 mar 2016 - 04:57

Primark

 

 

Los consumidores españoles vuelven a estar dispuestos a pagar más por comprar ropa. Después de años presionado a la baja por el descenso del consumo y el desplome del capital disponible en las familias, el importe medio que se desembolsa en España por cada prenda de moda ha vuelto a elevarse en 2015.

 

En concreto, el precio medio por prenda ha subido un 1,1% en 2015, después de contraerse un 3,3% en 2013 y un 1,9% en 2014, según datos de Kantar Worldpanel. Con la crisis económica, los precios del sector comenzaron un descenso en España, presionados también por la entrada de nuevos operadores que marcaban nuevos mínimos a las prendas.

 

La cadena irlandesa Primark, por ejemplo, con precios de en torno a cinco euros por camisetas y quince por pantalón, entró en el mercado español en 2006 y desde entonces no ha dejado de ganar terreno. La compañía finalizó 2015 con 9,53 millones de compradores, lo que la volvió a situar, por segundo año consecutivo, por delante de Zara, el concepto principal de Inditex, y de H&M.  El top ten lo cierra otro fenómeno low cost, Kiabi, con 3,05 millones de compradores.

 

Por su parte, Mango se sitúa en el noveno puesto, con 3,79 millones de compradores. Aunque continúa lejos de los precios de Primark o Kiabi, la empresa ha reducido sus precios dos veces en los últimos cuatro años. En 2012, la cadena catalana llevó a cabo una bajada de precios general del 20% para hacer frente a la caída del consumo y, la pasada semana, volvió a anunciar una reducción de los importes de sus prendas con el lanzamiento de una colección con precios reducidos.

 

 

Kantar Worldpanel

 

 

Sin embargo, después de años ganando terreno a ritmos galopantes a las cadenas más establecidas, los grupos de moda low cost comienzan a perder terreno. En 2015, la cuota de mercado de estas cadenas se situó en el 5,2%, una décima porcentual menos que el año anterior.

 

En el último año, también se ha reducido un hábito que ha ganado popularidad con la crisis, comparar precios, aunque continúa siendo muy común antes de tomar la decisión de compra. En 2015, el 63,9% de las personas afirmaron que comparaban precios entre diferentes tiendas antes de decidirse a hacer una compra. Sólo dos años atrás, este porcentaje ascendía al 66,6%.

 

Otro de los datos más reveladores que se extraen de los datos de Kantar Worldpanel es el menor peso de las rebajas. Aunque los periodos especiales de descuentos y las rebajas puntuales son cada vez más comunes, el número de prendas rebajadas sobre el total de artículos comprados ha sido en 2015 menor que hace en el año anterior.

 

 

 

 

En 2014, el 45% de la ropa que compraban los españoles tenía algún tipo de reducción sobre el precio original. En 2015, el porcentaje ha descendido 1,2 puntos, hasta 43,8%. Este descenso se produce justo en el año que eventos como el Black Friday o Cyber Monday, jornadas masivas de descuentos, se han extendido a casi todos los operadores del sector.

 

De hecho, según fenómenos de Kantar Worldpanel, la compra de artículos textiles durante la semana del 23 al 29 de noviembre, que incluye el Black Friday, se elevó un 10% respecto al mismo periodo del año anterior.

 

Al mismo tiempo que las prendas compradas en rebajas pierden peso sobre el total, el consumidor también ha aumentado el desembolso que realiza cuando compra un producto que no tiene descuento. Mientras el precio medio por prenda, incluyendo las full price y las rebajadas, se elevó un 1,1% en 2015, el importe que se paga, de media, por las prendas a precio completo registró una subida del 2,6%.