Entorno

Los ajustes enfrían la economía en los mayores mercados europeos para la moda

C. De Angelis

24 abr 2013 - 04:55

Chorro de agua fría para las perspectivas de las empresas españolas de moda en los mercados internacionales. Crecimiento menor al esperado, contracción del consumo y confianza en negativo son los principales rasgos de algunos de los mercados internacionales más importantes para la moda española, que tiene en las exportaciones su principal palanca de crecimiento.

 

En primer lugar, las últimas previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre la evolución de la economía de la Zona Euro, publicadas este abril, elevan en dos décimas la contracción esperada para este año, desde el 0,1% hasta el 0,3%. La economía de los países de la moneda común, que concentra la mitad de las exportaciones españolas de moda, continúa su ajuste y en 2014 crecerá sólo un 1,1%, según la institución que preside Christine Lagarde.

 

El empeoramiento de las previsiones es sustancial en algunos de los países más estratégicos del mercado europeo. Empezando por Francia, primer destino de las exportaciones españolas de moda y, junto a Alemania, Italia, Reino Unido y España, uno de los cinco mercados más importantes para la moda en Europa.

 

El Producto Interior Bruto (PIB) del país galo caerá este año, con un descenso del 0,1%, a pesar de que hasta enero el FMI esperaba un crecimiento para la economía francesa del 0,3%. La situación es todavía peor para Italia (segundo mercado de la moda española), cuya economía se contraerá en 2013 un 1,5%, cuatro décimas más de lo esperado en enero.

 

Francia e Italia también han empeorado sus magnitudes sobre el consumo. Según los últimos datos disponibles por el Eurostat sobre cada país, el comercio minorista se situó en febrero en negativo en Francia, con una caída interanual del 0,1%. En Italia, los datos llegan hasta enero, cuando las ventas del retail disminuyeron un 4,1% en comparación con el mismo mes de 2012.

 

Portugal, tercer cliente internacional de la moda española, también tiene ante sí una perspectiva económica aciaga, que podría castigar aún más a las exportaciones españolas de moda, que en 2012 disminuyeron un 21%. Atendiendo a las previsiones del FMI, la economía portuguesa, donde el consumo minorista disminuyo en febrero un 5,3%, se contraerá un 2,3% este año.

 

En Reino Unido, principal mercado de la moda española fuera de la zona euro, las previsiones económicas no son tan negativas. La economía de las Islas Británicas crecerá este año, aunque tres décimas menos de lo esperado en enero, a un ritmo del 0,7%. El consumo se mantiene en positivo en el país, con un alza del 3,8% interanual en febrero.

 

Alemania, cuarto mercado de la moda española, también escapa de la recesión europea, si bien sus perspectivas de crecimiento también son moderadas. La economía germana, cuyas ventas minoristas suben a un ritmo del 2,1%, crecerá un 0,6% este año, unas previsiones una décima mejores que las difundidas por el FMI en enero.

 

En este contexto económico de las grandes economías de proximidad se inscriben los planes de crecimiento de buena parte de las empresas españolas de moda, que tienen en áreas como Asia, Latinoamérica y Oriente Medio sus principales polos de crecimiento.

 

En el caso de Inditex, el gigante gallego ya ha convertido a  China en su segundo mayor mercado, por detrás de España, en número de establecimientos, mientras Mango pone el foco de su crecimiento en áreas como Latinoamérica, Sudáfrica o Australia, además de Europa. El grupo catalán se focaliza en países como Chile, Perú, Arabia Saudí, Emiratos Árabes, Filipinas, Indonesia, Malasia, Kuwait, Qatar y Tailandia.

 

Adolfo Domínguez basa su estrategia internacional en áreas como Asia, Latinoamérica y Oriente Medio, mientras Cortefiel refuerza su estructura logística con un centro de distribución en Moscú para crecer en Rusia, principal apuesta del grupo junto con China.