Entorno

Laura Ortiz (Federación Textil Sedera): “la palabra previsión ha pasado de moda”

S. Riera

14 abr 2015 - 04:47

Laura Ortiz es la primera mujer que preside una patronal española del textil. Al frente de la compañía familiar Tejidos A. Ortiz, la empresaria asumió el liderazgo de la Federación Textil Sedera hace un año, tomando las riendas de una de las agrupaciones empresariales de mayor trayectoria en España, cuyos orígenes se remontan al Gremio de Veleros de 1533, que representaba a los fabricantes de velas de seda para los barcos. La federación mantiene la sede en la Casa del Gremio de los Veleros, un regio edificio del centro de Barcelona que data de 1763. El Colegio de Arte Mayor de la Seda, que a principios del siglo XIX tomó el relevo en sus funciones al Gremio de Veleros, continúa vigente hoy como la entidad que cuida del patrimonio cultural de la federación.

 

Ortiz lidera la organización en un momento de cambio para el sector. “Se notan ya los efectos de la relocalización y de la paridad del euro con el dólar, y se notarán más”, asegura. La empresaria considera que estamos ante un escenario idóneo para que la industria textil se reactive. “La producción manufacturera en España no tiene ni tendrá los mismos costes que en los grandes países productivos, pero nuestros clientes deberán pensar si les interesa pagar más por el tipo de cambio o fabricar en cercanía”, explica.

 

Según Ortiz, al textil también le están beneficiando los tiempos del fast fashion. “La palabra previsión está pasada de moda, y no sólo en este sector, sino en todos, incluso en el automóvil”, afirma la empresaria, que asegura que las empresas se han acostumbrado ya a trabajar las series cortas y a los tiempos cortos, hasta el punto que ya forma parte de la normalidad.

 

El azote de la deslocalización industrial y la reciente crisis financiera provocaron una dura criba entre las empresas sederas en España, hasta dejar a la FTS con sesenta compañías asociadas y sólo dos organizaciones federadas, el Gremio de Cintería y la Asociación de Fabricantes de Tules, Bordados y Encajes. Ortiz considera que será difícil que vuelvan a crearse empresas. “Montar hoy en día una compañía industrial en España es muy complicado, sobre todo por los costes”, opina la empresaria, que sostiene que la mayoría de las fábricas que se mantienen en el país son familiares y están pilotadas por la segunda o tercera generación. Sin embargo, Otriz asegura que las aulas de Ingeniería Textil vuelven a tener estudiantes y tiene esperanza en que surja de ahí algún emprendedor.