Entorno

La moda española ‘pincha’ en Japón a las puertas del acuerdo de libre comercio con la Unión Europea

La Unión Europea y el país nipón, dos de las cuatro mayores economías del mundo, esperan cerrar este año un acuerdo de libre comercio entre ambos territorios.

S. Riera

28 mar 2017 - 04:38

 

La moda española afloja el ritmo en Japón mientras se acelera un acuerdo de libre comercio. Tokyo y Bruselas han dado un espaldarazo a las negociaciones de un pacto en esta dirección, tanto para dar un impulso a sus economías como por marcar perfil y dejar clara su posición frente a la oleada proteccionista. A las puertas de este escenario, las ventas españolas de moda pincharon en 2016 con el primer descenso desde 2009.

 

El primer ministro japonés Shinzo Abe estuvo la semana pasada en Bruselas para impulsar las negociaciones del acuerdo de libre comercio. La Unión Europea y el país nipón, dos de las cuatro mayores economías del mundo, esperan cerrar este año un pacto. Quedan aún flecos por atar, como la eliminación en Europa de tasas arancelarias sobre la industria japonesa del automóvil y la apertura de las licitaciones públicas del país asiático.

 

Las negociaciones entre la Unión Europea y Japón se iniciaron hace cuatro años, en marzo de 2013, pero los contactos se han acelerado coincidiendo con la retirada de Estados Unidos del Tratado Transpacífico, del que el país nipón forma parte. La próxima ronda de negociación entre ambas partes se celebrará el próximo abril.

 

 

Por otro lado, la economía japonesa ha empezado a virar su rumbo. El Producto Interior Bruto (PIB) del país asiático creció en el último trimestre de 2016 un 0,2% encadenando cuatro ascensos consecutivos intertrimestrales. La economía japonesa se encuentra inmersa en un plan de estímulo fiscal y monetario y, el año pasado, se benefició de una divisa débil y una incipiente recuperación de la demanda global, que auparon su comercio exterior. Al final, la economía del país cerró 2016 con una subida del 1% arrastrada por las exportaciones y a pesar de la debilidad del consumo interior.

 

No obstante, en este marco, España aflojó el ritmo de crecimiento de sus exportaciones de moda en 2016. En 2016, las ventas españolas del sector al mercado japonés se contrajeron un 1% respecto al año anterior, hasta 256,4 millones de euros. El país asiático se sitúa en la posición número 22 en el ránking de los principales países de destino de la moda española, por detrás de Arabia Saudí y por delante de Austria.

 

El retroceso de las ventas en 2016 viene precedido de seis años de crecimiento, en los que las exportaciones españolas del sector avanzaron a doble dígito durante 2011, 2012, 2013 y 2014. Pese a la caída del último año, España ha impulsado sus ventas en Japón en la última década un 77%.

 

 

Japón siempre ha seducido a las marcas españolas de moda, muchas de las cuales han dado sus primeros pasos en el continente asiático a través del mercado nipón. Con una población de 126,7 millones de habitantes, el país es la tercera economía del mundo. El PIB per cápita del país se sitúa en 38.216 dólares, lo que lo sitúa como el cuarto territorio asiático con mayores rentas por detrás de Singapur, Hong Kong y Taiwán.

 

El gasto en moda del país asiático se situó en 2015 en 83.023 millones de euros, según un estudio de EAE Business School con datos de Euromonitor. El gasto medio por habitante en prendas de vestir y accesorios alcanzó entonces los 654 euros. Sin embargo, las previsiones del estudio prevén un retroceso del mercado del 0,17% hasta 2020.

 

Tokyo se ha consolidado como una de las mecas mundiales de la moda, sobre todo por el dinamismo de algunos de sus barrios, como Shibuya. El distrito de Ginza, por su parte, es uno de los ejes del lujo y, de hecho, las rentas de sus calles se sitúan en el top five de las más elevadas del mundo, según el último informe Main Streets Across the World, de Cushman&Wakefield. Por otro lado, como futura sede de los Juegos Olímpicos de 2020, el país ha empezado a desarrollar nuevos complejos de compras.

 

El país, lugar de origen del cuarto mayor retailer de moda del mundo, Fast Retailing, ha concentrado la distribución del sector a través de cadena de grandes almacenes, algunas de las mayores son Daimaru, Hanujy, Isetan, Matsuzakaya, Mitsukoshi, Paro, Sogo&Seibu y Takashimaya.

 

 

Inditex, por ejemplo, desembarcó en el mercado japonés en 2008, a la par que en Corea del Sur. A las puertas de cumplir su décimo aniversario en el país, el gigante gallego de la distribución de moda suma en la actualidad 152 establecimientos, un centenar de ellos de Zara. Sin embargo, el grupo sólo opera en el país con su cadena insignia, Bershka, Stradivarius y Zara Home.

 

Mango, por su parte, decidió pisar el acelerador en este país a finales de 2016 cuando licenció su negocio online en el territorio a través de Locondo. A diferencia de Inditex, el grupo catalán está presente en Japón desde 1997 y cuenta con una filial propia en el país. La compañía de joyería Tous, por su parte, cuenta con ocho establecimientos en el país, mientras que la mallorquina Camper suma una cincuentena.

 

Mint&Rose, Unión Suiza, Adolfo Domínguez, BCN Brand, Masaltos.com o The Animals Observatory son algunas de las empresa españolas que en el último año han puesto al mercado japonés en su punto de mira.