La justicia europea se pronuncia sobre el caso del lino

La Unión Europea volverá a prounciarse mañana sobre el escándalo del lino. El Tribunal de Primera Instancia de la UE dictará la sentencia sobre la apelación del Gobierno español a la multa impuesta por la Comisión Europea, que asciende a 134 millones de euros. La sanción, impuesta en 2005, responde a las deficiencias en los controles de las subvenciones al lino y al cáñamo entre 1996 y 2000. La alegación española sostiene que la Comisión no justificó adecuadamente el alcance del perjuicio sufrido por el presupuesto comunitario a causa de las irregularidades en ese cultivo textil.El escándalo se inció en 1996, cuando Bruselas detectó deficiencias en la gestión y control en la producción española de lino textil y de cáñamo entre 1994 y 1995. En la campaña 94-95 se registraron 238 peticiones de ayudas para 3.366 hectáreas y se recibieron 411 millones de subvención. En la campaña siguiente, las peticiones se elevaron a 697, las hectáreas de lino a 11.024 y las subvenciones a 1.400 millones. En 1998, la Junta de Castilla-La Mancha denunció pagos de subvenciones a los agricultores por siembras que no se hacían, así como a las industrias por procesos de transformación ficticios en medio de la total indiferencia de los organismos de control del Estado, fundamentalmente a través del Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA). El Gobierno español asegura ahora que no hubo un incumplimiento que pueda justificar una corrección financiera y cuestiona el informe de la Oficina Comunitaria para la Lucha contra el Fraude (Olaf), en que se basa la Comisión para fijar la multa. La Comisión defiende, en cambio, que la superficie dedicada a la producción de lino y cáñamo había crecido exponencialmente. Según el Gobierno comunitario, este hecho estaba vinculado a cazadores de primas y a fallos en su control. El PP, partido gobernante en la época en que surgió el escándalo, siempre ha negado la veracidad de la trama y la atribuye a una maniobra política del PSOE. Los socialistas, precisamente, se enfrentan ahora a la sanción.