Entorno

La industria de la moda, más ‘eco’: dispara su gasto en protección ambiental un 5%

El textil, la confección y el calzado destinaron el año pasado 40.272 millones de euros a esta partida, el máximo desde 2012.

invierte

I. P. G.

18 jul 2019 - 04:49

La industria de la moda, más ‘eco’: dispara su gasto en protección ambiental un 5%, pero sigue a la cola 

 

 

La industria española de la moda invierte en ser más verde. En pleno avance de la sostenibilidad a lo largo de toda la cadena de valor del sector, también la moda española está reforzando sus esfuerzos en esta dirección.

 

En 2017, la industria textil, de la confección y del cuero y el calzado destinaron 40.272 millones de euros a la protección ambiental, un 5% más que el año anterior y su máximo desde 2012, según datos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE). La evolución de este presupuesto se mantiene en ascenso desde 2014, en línea con la recuperación de la actividad fabril en el país.

 

 

 

 

 

En total, la industria española gastó en 2017 un total de 2.519 millones de euros en esta materia, siendo la industria de la alimentación, bebidas y tabaco y la industria química y farmacéutica las que mayor presupuesto destinaron en términos absolutos.

 

De lo invertido por la moda, la mayoría, alrededor de 38,3 millones de euros, fueron gasto corriente, y el resto, casi dos millones de euros, inversión. El grueso de la partida se destinó mayoritariamente a la gestión de aguas residuales, con una inversión de 1,1 millones de euros, seguidos de la protección del aire y el clima, con poco más de medio millón de euros de presupuesto.

 

 

 

 

La industria española de la moda encadena ya cuatro años consecutivos elevando su gasto en protección ambiental, aunque continúa por debajo del máximo alcanzado en 2008, al principio de la serie histórica, cuando destinó 56,8 millones de euros a esta actividad.

 

Con la llegada de la crisis, el sector encogió cada año, salvo en 2012, su gasto en protección ambiental, que llegó a hundirse un 19,3% en 2013, si bien desde 2014 ha retomado la apuesta eco elevando año tras año su presupuesto.