Entorno

La divisa ‘sacude’ los emergentes y rediseña el comercio global de moda

La fuerte devaluación de las monedas de Turquía y Argentina han provocado un efecto contagio hacia el resto de economías en vías de desarrollo, muchas de ellas polos productivos del textil y otras, nuevos mercados de consumo.

S. Riera

14 sep 2018 - 04:54

La divisa ‘tambalea’ los emergentes y rediseña el comercio global de moda

 

 

La divisa amenaza a los emergentes de la moda. Turquía y Argentina han sido las primeras en tambalearse. La fuerte devaluación de la divisa de estos dos países ha sacudido al resto de monedas de economías emergentes como Brasil, Sudáfrica, Rusia, India, Chile o Indonesia, en un efecto dominó que aún está lejos de frenarse. La industria de la moda, cuyo músculo industrial está en países en vías de desarrollo y cuya distribución busca nuevos mercados en expansión, asiste a los primeros bandazos de los mercados monetarios.

 

Como principal hub productivos del textil europeo, las turbulencias económicas en Turquía afectan al conjunto de la industria de la moda en el continente. Ocurre lo mismo con India o Indonesia, que también ocupan las primeras posiciones entre los principales países de origen de las compras españolas del sector.

 

Entre enero y agosto, la lira turca ha llegado a perder casi el 50% de su valor y este debilitamiento ha provocado una mayor presión inflacionista, con repercusión inmediata en los precios de las materias primas y el consumo. Ayer, el banco central del país subió los tipos de interés al 24% para contener la inflación y fortalecer la divisa. Un paso en falso de Turquía agitaría aún más el miedo de los mercados en las economías emergentes.

 

 

 

 

Por el momento, la devaluación de la lira turca ha favorecido sus exportaciones textiles y de moda a España, que se han disparado un 11,64% en el primer semestre del año. La crisis turca ha azotado de manera directa a la rupia india, que en agosto alcanzó su nivel más bajo frente al dólar.

 

A principios de año, para comprar un dólar se necesitaban 63,67 rupias, a principios de septiembre eran 72 rupias. No obstante, a diferencia de Turquía, las compras españolas de artículos textiles y de moda de India han caído un 3,8% en la primera mitad del año.

 

La crisis económica en Argentina ha agitado aún más el mercado de divisas de economías emergentes. El peso argentino, por su parte, ha perdido casi el cien por cien de su valor en lo que va de año y continúa sin vislumbrar el fin de la caída. El rescate financiero del Fondo Monetario Internacional (FMI), la fuga de capitales y las dudas que genera el país podrían provocar un efecto contagio.

 

 

 

 

A pesar de quedar prácticamente fuera de las cadenas de aprovisionamiento de la industria española de la moda y de tener poca incidencia como destino de sus exportaciones, una desestabilización económica en Argentina o Brasil podría tener un efecto arrastre hacia el resto de economías de la región latinoamericana.

 

Las elecciones en Brasil y la incertidumbre que hay alrededor del futuro escenario político del país no ayudan a mejorar su situación económica. La volatilidad del real brasileño alcanzó máximos en siete años después de que uno de los candidatos fuera apuñalado la semana pasada. La depreciación de la divisa brasileña suma las turbulencias financieras en los emergentes y el nerviosismo político.

 

Chile ya se ha visto sacudido por la lira turca y por las alternaciones económicas en Lationamérica. La apreciación del dólar también ha tenido un impacto directo en el peso chileno, que entre febrero y agosto se ha depreciado cerca de un 20% y se prevé que no tarde en superar la barrera de los 700 pesos por dólar. No obstante, la solidez de la economía chilena hace prever que pueda asumir el impacto con un alza de tipos de interés y un aumento temporal de la inflación.

 

 

 

 

El rublo ruso tampoco ha escapado del impacto de la lira turca. La divisa no ha dejado de caer desde el principio de verano y las sanciones de Estados Unidos por el caso Skripal no han ayudado. El rublo, que tampoco ha llegado a recuperarse de la caída de finales de 2014, podría marcar mínimos si se incrementan las sanciones internacionales.

 

Las exportaciones españolas de moda a Rusia han empezado a sufrir esta situación. Así, mientras que en la primera mitad de 2017, las ventas del sector al mercado ruso escalaron un 30%, en el mismo periodo de este año han retrocedido un 10%. Inditex y Tendam (antes Grupo Cortefiel) son dos de los retailers españoles del sector que en los últimos años apostaron por el mercado ruso.

 

Otro de los mercados emergentes amenazado por la divisa es Sudáfrica. El país más industrializado del continente africano, entró en recesión técnica en el segundo trimestre de 2018. Al comunicarse el dato, a principios de septiembre, la divisa del país, el rand sudafricano, se hundió. A principios de mes, la moneada sudafricana cayó a mínimos de hace dos años.

 

La divisa de Indonesia tampoco ha escapado a estas turbulencias y también ha ido a la baja empujada por la fortaleza del dólar estadounidense. A principios de septiembre, el tipo de cambio superó por primera vez la barrera de las 15.000 rupias por dólar.