Entorno

Japón en el punto de mira: el coronavirus amenaza al tercer mayor mercado de consumo para la moda

El país asiático es el segundo mayor foco de la epidemia, donde se encuentra atracado el crucero Diamond Princess, y cuenta con un centenar de infectados.

Carmen Juárez

19 feb 2020 - 04:46

Japón en el punto de mira: el coronavirus amenaza al tercer mayor mercado de consumo para la moda

 

 

Japón, en el punto de mira ante la crisis del coronavirus. El crucero Diamond Princess, atracado en el puerto japonés de Yokohama, es el segundo mayor foco de coronavirus fuera de China, donde se encuentran alrededor de un centenar de infectados. A medida que crece la amenaza del coronavirus en el país nipón, también se elevan las alertas sobre el impacto que la epidemia puede tener en la economía japonesa, que es el tercer mayor mercado de consumo para la moda y que, además, se encuentra a las puertas de la celebración de los Juegos Olímpicos.

 

Los analistas ya han advertido de que el país se encamina hacia la recesión técnica después de que cerrara el cuarto trimestre de 2019 con un descenso de su Producto Interior Bruto (PIB) del 6,3% frente al mismo periodo de un año atrás. Esta caída ha sido mucho más pronunciada que la prevista por los analistas, que estimaban que la economía nipona sólo retrocediera un 3,7% durante el periodo.

 

Para el primer trimestre de 2020, la mayoría de los expertos también pronostican un descenso de la economía nipona, lastrada por el brote de coronavirus, lo que llevaría al país a recesión técnica (que se produce tras dos trimestres consecutivos en descenso).

 

 

 

 

En 2018, el consumo de moda en Japón alcanzó 66.038 millones de dólares y se espera que la cifra se eleve levemente hasta 66.035 millones de dólares para 2024, según datos de Euromonitor. Sin embargo, estas previsiones no tienen en cuenta el impacto del coronavirus, sobre que el ya han alertado los principales operadores del país.

 

A finales de enero, los grandes almacenes Isetan redujeron sus previsiones para el año fiscal, que finaliza el 31 de marzo, ante el brote. La compañía redujo su pronóstico de beneficio a la mitad, de 14.000 millones de yenes a 7.000 millones de yenes. Además, el grupo ha cancelado los viajes comerciales de agentes a Europa.

 

Los grandes almacenes y las zonas comerciales son dos de los grandes afectados por el desarrollo del virus, especialmente por la caída del tráfico de clientes extranjeros. “El número de clientes que se abstienen de ir a lugares comerciales está aumentado, lo que conduce a un menor tráfico en nuestros establecimientos”, ha explicado a WWD un portavoz de Isetan.

 

 

 

 

Fast Retailing, dueño de Uniqlo, también ha alertado sobre la situación. El gigante, tercer mayor grupo de distribución de moda por cifra de negocio, ha cerrado 350 establecimientos de Uniqlo en China de manera temporal, además de otras 27 tiendas de la cadena Theory. La mayoría de estos establecimientos se encuentran en zonas que han sido restringidas por las autoridades chinas ante la alerta del coronavirus.

 

Shiseido, por su parte, también ha sufrido el impacto de la crisis. Los empleados chinos de la compañía han vuelto a trabajar tras las fiestas de Año Nuevo, pero desde sus casas. En paralelo, las fábricas de la empresa en China tienen previsto reiniciar su actividad a partir del 24 de febrero.

 

Las ferias internacionales del sector que tenían previsto celebrarse durante estas semanas en Japón también han sido canceladas. Es el caso de Denimsandjeans, que debía tener lugar entre el 4 y el 5 de marzo.

 

 

 

 

Más allá de ser el tercer mayor mercado para la moda, Japón cuenta con una de las ciudades más atractivas para el retail. Tokio es la tercera ciudad más hot para las empresas de moda, según el ránking Hot Retail Cities 2019.

 

La capital nipona ha ascendido cinco posiciones en el ránking, situándose en el tercer puesto en la última edición del informe. El ascenso de Tokio se ha visto impulsado por el desarrollo de su gigante área metropolitana y la solidez de su economía.

 

Para los gigantes de la moda, Tokio es una de las principales plazas en sus planes de expansión. Ginza es la vía preferida por los retailers, que además es una de las ubicaciones más caras para abrir un establecimiento comercial, con 11.838 euros por metro cuadrado al año. Además, la ciudad cuenta con grandes centros comerciales como Futakotamagawa, Rise, DiverCity o Kitte, además de grandes almacenes como Isetan o Parco.

 

 

 

 

Además de la moda, el turismo es otro de los sectores que se ve más amenazado por esta situación, ya que es uno de los principales motores de la economía del país. Japón recibió alrededor de 39 millones de turistas en 2019, la mayoría de ellos, 9,6 millones, procedentes de China.

 

De hecho, los turistas chinos en Japón representan un tercio del gasto turístico en el país. Sin embargo, ante el nuevo escenario se han cancelado más del 60% de las reservas de viajes de turistas chinos a Japón. Según datos de la Japan Association of Travel Agents, se espera que al menos 400.000 viajeros chinos cancelen su viaje en marzo. Esta situación aleja la meta del país nipón de alcanzar los cuarenta millones de llegadas en 2020.

 

Otra de las celebraciones que se podría ver afectadas ante la crisis del coronavirus son los Juegos Olímpicos, que tendrán lugar en Tokio entre la segunda quincena de julio y la segunda quincena de agosto. Por ahora, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha aconsejado al Comité Olímpico Internacional (COI) no cancelar la celebración ni cambiar de sede ante la amenaza de la epidemia.

 

De hecho, John Coates, presidente de la comisión coordinadora del evento deportivo del COI, no contempla el traslado de los Juegos a otra ciudad ni la puesta en marcha de un plan de contingencia. “No hay motivos para tener planes de contingencia ni para contemplar el traslado de los Juegos”, señaló el pasado viernes Coates en una rueda de prensa en Tokio.