Grecia deja atrás los rescates un 30% más pobre y con la moda al ralentí

Grecia abre una nueva etapa con perspectivas inciertas. Los socios del euro y las instituciones comunitarias abordaron ayer los últimos detalles para poner fin al tercer rescate del país mediterráneo, que se materializará el próximo veinte de agosto. Tras una década de recesión económica y fuertes ajustes fiscales, el balance no lleva al optimismo en el que llegó a ser el décimo mercado más importante para la moda española en el exterior. Pese a la recuperación de la inversión extranjera, la economía griega ha encogido un 30% y la tasa de paro se ha duplicado.

El mercado de la moda en Grecia no ha sido ajeno a la caída generalizada de los indicadores macroeconómicos, registrando un fuerte retroceso del consumo y, en consecuencia, de las importaciones del sector. En los últimos siete años, el mercado de las prendas de vestir en el país ha encogido un 36%, hasta 3.744 millones de dólares (3.233,7 millones de euros).

Grecia ha sido uno de los países europeos más castigados por la crisis económica. La elevada deuda pública y la detección de irregularidad sistémicas en el envío de datos fiscales a Bruselas provocó un desplome de la bolsa y los bonos griegos entre finales de 2009 y principios de 2010. Ese mismo año, los países del euro y el Fondo Monetario Internacional (FMI) acordaron un primer rescate de 110.000 millones de euros para el periodo 2010-2012.

El primer rescate de Grecia tuvo lugar en mayo 2010, cuando la Unión Europea y el FMI prestaron 110.000 millones de euros al país

En julio de 2011, los mandatarios de la eurozona pactaron un segundo rescate para Grecia por un importe de 109.000 millones de euros, más la aportación voluntaria del sector privado, que se situó en casi 50.000 millones. En octubre del mismo año, la UE estableció una quita del 50% de su deuda con la banca privada. La operación se formalizó finalmente en marzo de 2012.

Finalmente, el tercer rescate al país mediterráneo tuvo lugar en agosto de 2015, cuando recibió luz verde un nuevo programa de asistencia financiera de hasta 86.000 millones de euros, que concluye el próximo veinte de agosto. Tras cumplir las medidas de seguridad impuestas por sus prestamistas, Grecia se dispone a iniciar una nueva era con una situación radicalmente distinta a la de hace una década, después de que los socios europeos cerrasen ayer los últimos cabos sueltos del tramo final del tercer rescate griego.

Con alrededor de once millones de habitantes, el Producto Interior Bruto (PIB) de Grecia se situó en 192.691 millones de dólares (166.430 millones de euros) en 2016, un 29,5% menos que hace diez años, según datos del Banco Mundial. La renta per cápita evolucionó en línea con la riqueza nacional, retrocediendo un 8,6% entre 2007 y 2017, hasta 26.765 dólares (23.117,3 euros), según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (Ocde).

El 21,5% de la población griega en edad de trabajar está en paro

Según el mismo organismo, la tasa de desempleo entre la población activa (4,87 millones de personas según la Organización Mundial del Trabajo) se situó en el 21,5% a cierre de 2017, frente al 9% de media entre los países de la zona euro. El paro es especialmente alto entre el segmento de población más joven, que en 2017 se situó en el 43,6%, la tasa más alta de toda Europa. La deuda pública griega, por su parte, equivalía al 191,1% del PIB nacional

En consecuencia, la renta media de los hogares en el país también arrastra un largo periodo de descensos. En 2016, los ingresos de las familias cayeron un 1,1%, algo menos que en el año anterior. Las rentas se han encogido cada año desde 2010, salvo en 2014.

El endeudamiento de las familias griegas se situó en el 111,6% de su renta disponible el año pasado. Por otro lado, el salario medio en Grecia se situó en 26.064 dólares (22.511,8 euros) en 2017, por debajo del de países como Polonia y Eslovenia. 

El mercado de la moda, lejos del nivel precrisis

La crisis, el aumento del desempleo y la bajada de los ingresos de los hogares crearon un cóctel propicio para que el sector de la moda en Grecia perdiera varias tallas. En 2010, el mercado de prendas de vestir en el país se situó en 5.863 millones de dólares (5.063,9 millones de euros), mientras que en 2017 alcanzó 3.744 millones de dólares (3.233,7 millones de euros), un 36% menos, según datos de Statista. Tras encadenar dos años al alza en 2017, las previsiones pasan por que las ventas de ropa en el mercado griego crezcan ligeramente por encima del 1% anual hasta 2020.

Las importaciones de moda también han experimentado un fuerte descenso desde el arranque de la crisis. Desde 2007, las compras al extranjero se han reducido un 23%, hasta 3.573,9 millones de euros en 2017, aunque han repuntado en los últimos dos años. Las exportaciones de moda del país, por su parte, se redujeron un 3,5% el año pasado, hasta 2.085,4 millones de euros.

La ropa y el calzado tienen un peso reducido en el presupuesto de las familias griegas. Según los datos más recientes divulgados por la agencia estadística europea Eurostat, la moda copó el 3,8% del gasto total de los hogares del país en 2016, la sexta cuota más baja de la Unión Europea.

Aunque en el último año ha repuntado, la importancia de esta categoría de productos en la cesta de los griegos sigue lejos de los valores de una década atrás. En 2006, la ropa y el calzado representaban el 5,1% del gasto de los hogares.

Grecia pierde posiciones para la moda española

En 2007, Grecia era el décimo mayor mercado para la moda española en el extranjero, con unas ventas de 356 millones de euros, según datos del Icex. Sin embargo, la llegada de la recesión económica y los fuertes ajustes que debió tomar el país en 2009 y 2010 impactaron la evolución del sector en el mercado griego.

Tras alcanzar los 383 millones de euros en 2009, las exportaciones españolas de moda a Grecia encadenaron tres años consecutivos a la baja. En 2012, las ventas al país tocaron fondo, cerrando el ejercicio en 305 millones de euros.

Desde 2013, las exportaciones al mercado griego se han mantenido al alza, aunque el mayor empuje de otros mercados emergentes ha provocado que el país pierda posiciones en el ránking de principales clientes exteriores del sector. En 2017, Grecia fue el decimoquinto mayor mercado para la moda española, con unas ventas de 405,8 millones de euros. 

El país estaba detrás de estados como Rusia, Bélgica, Turquía, México y China. Sin embargo, las compras de moda española desde el mercado griego se situaron por encima de las de Suiza, Rumanía, Japón y Emiratos Árabes, que cerraron el top 20.