Fendi se suma a la ‘fuga’ de firmas de lujo de Argentina

Fendi, propiedad de LVMH, es la última gran marca internacional de lujo que abandona Argentina. Siguiendo los pasos de otras compañías como Louis Vuitton, Armani y Saint Laurent, la enseña italiana cierra su tienda en Buenos Aires debido a las trabas de importación que sufren sus artículos. A la política proteccionista liderada por Cristina Fernández de Kirchner, la presidenta de Argentina, se suma el control sobre la circulación de divisas locales y al colapso de la moneda.

Enseñas como Fendi están obligadas a importar, ya que los proveedores con los que trabajan están ubicados en sus países de origen. Las medidas adoptadas por el gobierno argentino resultan un peaje enorme para las empresas extranjeras, lo que ha provocado que muchos argentinos de poder adquisitivo alto hagan sus compras en ciudades como Miami o Nueva York, y en países como España.

Argentina estaba considerada, hace menos de tres años, uno de los mercados emergentes con mayor potencial de crecimiento a nivel mundial. Ahora, el país latinoamericana registra el mayor número de marcas internacionales de lujo en echar el cierre. Esto ha provocado que algunas enseñas se trasladen a países vecinos, como Uruguay.