España, el país más mayor: ¿y si el envejecimiento dispara los precios de la moda?

A más mayores, precios más elevados. En España, el elevado envejecimiento de la población dibuja un escenario de alta inflación. Se estima que, en este contexto, el país se enfrente a presiones inflacionistas de unos cinco puntos porcentuales en las próximas décadas, muy por encima del resto de economías avanzadas, según recoge un trabajo elaborado por el Bank for International Settlements (BIS).

Mientras que en países como Dinamarca, Suecia o Finlandia, el efecto será relativamente escaso, estados como España, Japón, Corea del Sur, Irlanda, Italia, Grecia y Portugal experimentarán tasas de inflación más fuertes. España, en concreto, será junto con Japón el país más envejecido del mundo en 2050, según proyecciones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (Ocde).

Si el envejecimiento poblacional que afronta España, con más gente jubilada que personas en edad de trabajar, conlleva un alza generalizada de los precios, quizá la moda se vea impactada por ello. Pese a que tradicionalmente el sector ha sido deflacionista y los precios de la ropa y el calzado en el país crecen por debajo de la inflación general, el consumo está de capa caída y las ventas descienden desde hace meses, ajenas a la recuperación de los indicadores macroeconómicos y la recuperación del empleo.

En España, pese a que los precios crecen por debajo de la inflación general, las ventas del comercio minoristas de moda caen desde hace meses

A 1 de enero de 2017, España contaba con 8,76 millones de habitantes mayores de 65 años, que representaban casi el 19% sobre el total de población, según los últimos datos disponibles del Padrón continuo recopilados por el Instituto Nacional de Estadística (INE). El segmento poblacional de mayor edad creció un 1,23% en 2017 respecto al año anterior, mientras que el grupo de hasta 15 años encogió un 0,36%, hasta 7,14 millones, encadenando su cuarto año consecutivo a la baja.

Se prevé que ambas tendencias, el crecimiento de la población senior y la progresiva contracción de los segmentos más jóvenes, se afiance. El pasado febrero, un panel de especialistas convocado por el Círculo de Economía y la Fundación Transforma España criticaron la inacción política en materia demográfica.

Los expertos alertaron que la población española mayor de 65 años representará el 26% del total en 2031, frente al 19% actual y el 8,2% que copaba en 1960. No obstante, en algunas comunidades autónomas como Asturias la ratio de mayores de 65 años ya se sitúa en el 25%, mientras que la de menores de quince años es del 11,7%.

Los precios de la moda, por debajo de la cesta de la compra

El pasado mayo, el Índice de Precios al Consumo (IPC) de la ropa y el calzado se elevó un 0,8% respecto al año anterior, su mayor subida desde marzo de 2017, según los últimos datos del INE. Los precios de estos productos encadenaron su quinto mes consecutivo creciendo por encima del 0,5%.

La evolución continuó estando, no obstante, por debajo de la del IPC general, que se incrementó un 1,1% en abril. Pero, mientras que los precios de la moda han acelerado mes a mes desde noviembre de 2017, la inflación general ha marcado una evolución de dientes de sierra, con subidas de entre el 0,6% y el 1,7%.

Pese a que los precios de la ropa y el calzado se han elevado a un ritmo inferior, la moda está siendo una de las categorías más penalizadas por el consumo. Las ventas del comercio de moda en España cerraron 2017 en plano y, en el primer trimestre de 2018, acumulan un descenso del 5,7%, según datos de la Asociación Empresarial del Comercio Textil, Complementos y Piel (Acotex).

Los datos de Acotex se asemejan a los de la empresa de estudios de mercado Kantar Worldpanel. Según datos de esta compañía, las ventas de moda en España crecieron un 0,4% en 2017. Un año antes, el sector redujo su facturación un 9%. El gasto medio por individuo, según Kantar, fue de 594 euros, diez euros más que en 2016, aunque por debajo de los 639 euros de 2015.

En paralelo, el peso de la ropa y el calzado en el presupuesto de los hogares españoles también ha ido a la baja. En 2016, las familias del país gastaron 1.429 euros de media en estas categorías, un 5,07% de su gasto total anual, frente al 6,8% que representaba en 2006, según datos de la Encuesta de Presupuestos Familiares del INE. En 2015, el peso fue del 5,74%.

Pese a que en términos absolutos el gasto medio en moda está inmerso en una lenta recuperación desde 2014, el peso de esta partida sobre el total del presupuesto familiar no sólo no ha conseguido recuperar el terreno perdido durante los años de crisis económica en el país, sino que ha seguido perdiendo importancia en el gasto de los hogares.

El importe destinado por los hogares españoles a la compra de ropa y calzado está por detrás del que destinan a otras actividades como los hoteles, cafés y restaurante, donde el gasto roza los 2.550 euros al año, y el ocio, los espectáculos y la cultura, donde se destinan casi 1.600 euros.