El punto y la confección plantan al CIE y los sindicatos en la negociación del convenio textil

La tensión dentro del Consejo Intertextil Español (CIE) no afloja. La Agrupación Española del Género de Punto (Aegp) y la Federación Española de Empresas de la Confección (Fedecon) no acudieron ayer al nuevo encuentro entre patronal y sindicatos para negociar el próximo convenio sectorial. Ambas organizaciones reclaman que se anule el acta de constitución de la mesa, que tuvo lugar a principios de enero, para continuar la negociación junto al resto del CIE.

Las industrias del punto y la confección se desmarcan por el momento de la negociación del  nuevo convenio sectorial, que substituirá al que concluyó el pasado 31 de diciembre. A pesar de haber mantenido encuentros con el CIE para rebajar la tensión que se vive en el seno de la patronal, ambas organizaciones empresariales mantienen en firme su voluntad de trazar su propio convenio si en el que actualmente se negocia no se contemplan sus peticiones.

Los presidentes de Aegp y Fedecon, Joan Canals y Ángel Asensio, respectivamente, consideran que el acta de constitución de la mesa de negociación del convenio es falsa porque no atiende a los hechos. Canals y Asensio sostienen que en el documento no consta que abandonaron su puesto durante el encuentro. Por su parte, el presidente del CIE, Alejandro Laquidain, y los representes sindicales, consideran que el acta es totalmente válida.

Los máximos representantes de las empresas de prenda acabada justifican el plantón de ayer argumentando que consensuaron con Laquidain no volver a convocar la mesa hasta que no hubiera una postura conjunta en el CIE. Canals y Asensio aseguraron haber recibido con sorpresa la notificación del nuevo encuentro con los sindicatos sin haber llegado a un acuerdo previo con el resto de entidades agrupadas en el CIE.

El presidente del CIE, por su parte, ha asegurado que la voluntad del punto y de la confección es la de desarrollar su propio convenio colectivo y que así lo comunicó ayer a los sindicatos. “Es lógico que la mesa continúe su trabajo al margen de que el CIE tenga conflictos internos”, aseguró Laquidain.