El ‘low cost’ se hace fuerte en España: la moda a bajo precio eleva un 45% sus clientes en tres años

La moda low cost encuentra en España terreno abonado para su crecimiento. Las cadenas que venden moda a bajo precio han disparado su negocio en el país desde el inicio de la crisis. En los últimos tres años, estas empresas han aumentado un  45% su número de clientes, según datos de Kantar Worldpanel.

La empresa, especializada en investigación de mercado, engloba a cuatro grandes cadenas en la categoría de moda low cost. Se trata de Primark, Kiabi, Shana y Lefties, esta última propiedad de Inditex.

Así, mientras el conjunto del sector de la distribución de moda ha reducido su tamaño en España, las empresas low cost han elevado un 45% su cifra de clientes, mientras en volumen de prendas vendidas el incremento ha sido del 54%.

Primark es, de las cuatro cadenas, la que ha registrado un mayor crecimiento en el mercado español durante los últimos años. De hecho, en 2014 se ha convertido en la primera cadena del país por número de unidades vendidas, adelantando a Zara.

La cadena irlandesa entró en España en 2006 y actualmente cuenta con cuarenta tiendas en España. Según datos del Registro Mercantil, Primark finalizó el ejercicio 2013 (concluido en agosto de dicho año) con una cifra de negocio de 714,19 millones de euros en España, lo que supuso un crecimiento del 40% respecto al ejercicio precedente.

Lefties, por su parte, está llevando a cabo una constante pero silenciosa estrategia de crecimiento. Considerada todavía por Inditex como parte de Zara, finalizó el último ejercicio (concluido el 31 de enero de 2014) con unas ventas de 106,67 millones de euros, lo que supuso un crecimiento del 9,48%. En España, donde la cadena suma un centenar de establecimientos, Lefties elevó sus ventas un 8% en el último ejercicio.

La francesa Kiabi, por su parte, registró un crecimiento del 15% en España el último año, hasta 160 millones de euros. La empresa, especializada en moda para toda la familia, cuenta con una red de 55 establecimientos en el mercado español, donde prevé llevar a cabo quince aperturas más en los próximos tres años.

Si Primark, Lefties y Kiabi han aprovechado la crisis para crecer en España, Shana ha nacido en pleno ciclo económico bajista. Shana es propiedad del empresario Julián Imaz e inició su desarrollo a mediados de 2010. Con presencia en una treintena de mercados internacionales, Shana cuenta con un centenar de establecimientos en el mercado español, donde está creciendo tanto a través de tiendas propias como de franquicias y corners en grandes almacenes.