Entorno

El consumo de moda nupcial en España se recupera de la crisis y alcanza 315 millones de euros

Modaes

11 abr 2016 - 14:29

 

Las novias españolas gastan más en el vestido. Las ventas de moda nupcial en España crecieron un 17,5% en 2014 hasta 315 millones de euros y retomaron la senda de crecimiento, después de siete años consecutivos de retrocesos, según se desprende del estudio Millennial Brides, nacer en los 80’s, casarse hoy, que ha elaborado el profesor del Iese José Luis Nueno. El gasto en vestidos de novia en España tocó fondo en 2013, cuando el consumo se situó en 268 millones de euros.

 

A pesar del ascenso de las ventas del comercio minorista del sector nupcial en España en 2014, la cifra dista aún de la cota alcanzada en 2006, justo antes de la crisis económica, cuando el gasto ascendió a 606 millones de euros. En este sentido, entre 2006 y 2014, el precio medio del vestido de novia también se encogió, pasando de los 1.600 euros de ocho años atrás a los 1.033 de 2014. Sin embargo, en relación a 2013, el valor medio creció un 14,8%.

 

Nueno ha señalado que el sector nupcial en España cuenta todavía con espacio por recorrer. En este sentido, el experto ha hecho hincapié en las exportaciones: “el negocio no está en Occidente, sino en las economías emergentes: en 2020, por cada boda que haya aquí, habrán nueve allí”. En 2030, la brecha se ampliará todavía más y, según Nueno, por cada joven en edad de casarse en España habrá 25 en el norte de Europa y 247 en el resto del mundo.

 

 

El experto señala, que las previsiones en la compra de vestidos de novia para el 2020 en todo el mundo son positivas y que México y Emiratos Árabes Unidos serán los países que tirarán del consumo. Estados Unidos se mantendrá como el principal mercado, mientras que en España disminuirá el número de bodas por cuestiones demográficas.

 

En cuanto a España, los futuros novios serán los representantes de la generación millennial, los nacidos entre la década de los ochenta y los primeros años del siglo XXI, todos ellos nativos digitales. En este sentido, las novias millennial cambiarán el sistema de compra y el ecommerce será un imperativo, aunque la experiencia final continuará estando en las tiendas físicas.

 

El profesor sostiene que se trata de una generación que pospone la decisión de contraer matrimonio y que esto implica que los cónyugues tienen más renta y un mayor empoderamiento en la toma de decisiones. No obstante, el hombre continúa ocupando un segundo plano en la planificación de una boda y, en la gran mayoría de los casos, mantiene la atención sólo en su traje. “Sí hay parejas más modernas en las que el novio se involucra más en la toma de decisiones, pero continúan siendo una minoría”, señala el experto.