Entorno

El comercio global de ropa y calzado cae un 1,5% en 2015 y marca la cota más baja desde 2011

Modaes

23 nov 2015 - 17:36

El comercio mundial de ropa y calzado caerá un 1,5% en 2015 arrastrado por la devaluación de gran número de las divisas en la mayoría de los países productores. Este descenso sitúa los intercambios comerciales globales del sector en su nivel más bajo desde 2011, según el estudio Trade and policy: the world’s leading clothing exporters and key markets, de Textiles Intelligence.

 

Muchos de los países productores cuyas divisas están vinculadas al dólar las han devaluado a lo largo de este año con el objetivo de que sus exportaciones ganen competitividad. Ejemplo de ello es el yuan chino o la rupia india. La industria china intenta así recuperar competitividad, sobre todo, después del acuerdo trans Pacífico de libre comercio, que coloca en una posición privilegiada a Vietnam.

 

Turquía, por su parte, también ha devaluado la libra turca. En 2014, el Gobierno turco devaluó su divisa local un 13% y, en lo que va de año, un 19%, mejorando así su posición ante los mercados europeos. No obstante, la devaluación de la moneda que ha llevado a cabo Turquía, si bien la ha beneficiado en las exportaciones, la ha perjudicado en las importaciones y, en concreto, en las de tejidos para la confección, ya que muchos de ellos proceden de China.

 

Además del impacto de la divisa, otros factores que influyen en la evolución del mercado mundial de la ropa y el calzado son una caída de las importaciones chinas y de otros países emergentes, el descenso del precio del petróleo y de la mayoría de las materias primas, como el algodón.

 

Las previsiones a corto plazo distan de ser optimistas. Según el informe, el crecimiento del comercio en el sector podría verse obstaculizado de nuevo por una desaceleración más aguda de lo esperado como consecuencia de un aumento de los tipos de interés en Estados Unidos y un nuevo retraso en la recuperación económica europea por la crisis de los refugiados.

 

No obstante, las previsiones continúan indicando una recuperación en el consumo de moda en 2016, que tenderá a acelerarse hasta 2019. Este escenario contribuirá a contrarrestar el descenso del comercio mundial de mercancías, así como el precio del petróleo y el de las materias primas, que continuará a la baja.