Entorno

Coronavirus: Turquía sube precios y amenaza los márgenes de la moda en 2020

El desplazamiento de pedidos a países de la cuenca euromediterránea está provocando una subida de precios por parte de los proveedores.

P. Riaño / C. Juárez

6 mar 2020 - 05:00

Coronavirus: Turquía sube precios y amenaza los márgenes de la moda en 2020

 

 

Ya no sólo el ecommerce amenaza los márgenes de la industria de la moda. Un nuevo elemento sobrevenido presiona a la baja los márgenes del sector. El traslado de forma repentina de producciones a Turquía está llevando a una subida de precios y los gigantes se preparan ya para un recorte de sus márgenes en 2020. “Hay colapso de capacidad: los que ya estaban allí han conseguido espacio, pero los que hemos llegado tarde o no tenemos opción o pagamos más”, afirma un ejecutivo del sector.

 

La situación se repite en Marruecos, Túnez, Rumanía y Portugal, pero Turquía es el mercado por el que más están apostando los grupos de moda para hacer frente a la ruptura de la cadena de suministro por la paralización de las fábricas en China y la afectación de puertos y aeropuertos.

 

Son varios los ejecutivos del sector que alertan ya de una subida de precios, principalmente en Turquía. El impacto de este movimiento de los proveedores turcos se notará, sobre todo, en la temporada otoño-invierno 2020, aunque los márgenes de todo el ejercicio están ya comprometidos.

 

 

 

 

Además de la proximidad al mercado europeo de consumo, una de las ventajas de Turquía como hub de aprovisionamiento para el sector de la moda es el desarrollo en el país de toda la cadena de valor, desde la producción de materias primas (Turquía es el séptimo productor mundial de algodón y uno de los mayores consumidores de esta materia prima) hasta la confección. Esta estructura dota al país de rapidez en la respuesta.

 

Turquía es actualmente el sexto mayor exportador de textil del mundo, con un 3,1% del total en 2018. El ránking está liderado por China, que en 2018 copó el 37,6% de las exportaciones totales de textil y el 31,3% de las de ropa, seguido a gran distancia por la Unión Europea, Bangladesh, Vietnam e India.

 

A lo largo de los últimos años, cada vez son más las compañías que están apostando por Turquía como hub de aprovisionamiento, un movimiento que ahora se está acelerando. Inditex es uno de los grupos que más está apostando por Turquía como back up en plena crisis china.

 

 

 

 

El gigante gallego ya tenía en Turquía su principal hub de aprovisionamiento en cercanía. A cierre del último ejercicio, la matriz de Zara contaba con 198 proveedores en el país, que sumaban una fuerza laboral de 251.277 personas.

C&A, H&M o Gap son otras de las compañías internacionales del sector que se aprovisionan en el país. La holandesa trabaja con 132 fábricas en Turquía, mientras que Gap tiene ocho proveedores en el país y H&M, tres.  

 

“Lo cierto es que China ya estaba dejando de ser competitiva en precios en los últimos años y ya estábamos buscando otros sitios donde aprovisionarnos: la situación actual no hace más que llenarnos de razones para volver a la proximidad”, explica un ejecutivo del sector, que agrega que “la evolución de la divisa ha hecho de Turquía un mercado hipercompetitivo”.

 

Turquía ha atravesado uno de sus peores momentos económicos tras la debacle de la lira en 2018, después de que Estados Unidos anunciara que duplicaba los aranceles a la importación de acero y aluminio de ese país.

 

En agosto de 2018, la lira turca perdió un 25% de su valor, acumulando una devaluación del 40% desde inicios de año. Tras esta situación, en Banco Central de Turquía inyectó 6.000 millones de dólares en el sistema financiero y resolvió reducir los limites de reservas de divisas permitidas a los bancos turcos para así retirar las liras del mercado, dar liquidez al sistema y estabilizar el valor de la lira. A cierre de esta edición, la lira cotizaba a 0,16 dólares.

 

 

 

 

El textil, muy sensible a los costes productivos, sacó punta de esta devaluación para acelerar las compras al país. En 2018, la Unión Europea elevó un 2% sus compras a la industria textil turca, que se afianza como el tercer mayor hub del sector europeo, según datos del Icex España Exportación e Inversión.

 

En 2019, las exportaciones turcas de moda registraron un incremento del sólo el 0,4%, hasta 17.700 millones de dólares. Antes de que estallara la crisis del coronavirus, la Asociación de Exportadores de Ropa de Estambul predijo que las exportaciones de moda del país superarán los 19.000 millones de dólares en 2020.

 

La industria textil de Turquía está formada por 89.085 empresas especializadas tanto en el textil, la confección, como en el cuero y el calzado, según el instituto estadístico del país. El sector emplea, además, a trece millones de personas. El salario mínimo interprofesional (SMI) de Turquía se ha incrementado un 55,3% entre 2016 y 2019, pasando de 1.647 liras a 2.558,4 liras mensuales.

 

La desaceleración mundial de la economía también ha afectado a Turquía. En 2018, el Producto Interior Bruto (PIB) del país creció un 2,8%. En 2019, la economía turca redujo su ritmo, hasta registrar un avance del sólo el 0,2%, según datos del Fondo Monetario Internacional (FMI).