Convenio textil: UGT busca un acuerdo con CCOO antes de ir al arbitraje

El convenio textil sigue sobre la mesa a las puertas de firmarse las tablas salariales para este año. UGT y CCOO volverán a reunirse en una semana para buscar un pacto in extremis sobre la subida del salario mínimo en el sector textil antes de acudir al arbitraje. La distancia entre ambas partes radica en el punto de partida del salario mínimo: la masa bruta salarial por parte de UGT y el salario base, por parte de CCOO.

Así concluyó la reunión mantenida ayer en el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (Sima), la segunda que se convoca desde la firma del convenio, el pasado 3 de septiembre. En esta ocasión, CCOO activará el artículo seis del acuerdo, en el que se garantiza la figura de un árbitro en caso de conflicto. Esta figura tiene decisión jurídica y el laudo que dicte será de obligado cumplimiento.

No obstante, antes de dar este paso, UGT y CCOO se han emplazado a la semana que viene para acercar posturas sobre el salario mínimo. El pasado noviembre, UGT intentó acercar posiciones y convocó a la comisión paritaria de la mesa de negociación para constatar que será obligatorio para todas las empresas del sector situar el listón del salario mínimo en 14.000 euros a partir del 1 de enero de 2021 y cumplir con lo pactado en el Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (Aenc).

La aplicación del salario mínimo sobre el sueldo base implicaría una subida de casi un 5% más sobre el alza del 9% pactada

Sin embargo, desde CCOO se puntualiza que lo pactado es la masa salarial bruta anual y no el salario base. Según el sindicato, con este matiz, la empresa podría llegar a 14.000 euros anuales introduciendo pluses y horas extras. Desde UGT se sostiene que la aplicación del salario base, tal y como pide CCOO, supondría una subida de casi un 5% más sobre el alza del 9% pactada.

La patronal rechaza de pleno la aplicación del salario mínimo de 14.000 euros anuales como salario base por suponer una subida por encima de lo acordado. UGT, por su parte, teme que de llegar a introducirse pudiera tener un efecto rebote y llegar a provocar que muchas empresas se descolgaran del convenio.

Según UGT, cerca de 80.000 trabajadores del sector textil y de la confección se han adherido ya al convenio colectivo del sector, pactado el pasado septiembre y en el que se contemplan incrementos salariales del 2% para 2018 y 2019, y del 1,8% para 2020. El sindicato volvió a subrayar que el convenio pactado es bueno para la industria y señaló que, en otros pactos laborales, CCOO está propiciando la firma de convenios por debajo de los incrementos del Aenc.

En paralelo, el proceso judicial del convenio sigue también su vía en la Audiencia Nacional, después de que CCOO denunciara el pacto de eficacia limitada por considerar que hay artículos que no se pueden aplicar. En este sentido, CCOO denuncia que el partido que no tiene mayoría en la representación sindical en el sector del textil y la confección, UGT, firmó el convenio en solitario. El juicio está previsto para el próximo 5 de febrero.