Cinco años después: los supervivientes de la crisis en la industria de la moda

Apenas 500 empresas. De las más de un millar de compañías de la industria de la moda que comenzaron su andadura en plena crisis, sólo quinientas han logrado sobrevivir al envite de la recesión, mientras que otras tantas se han quedado por el camino.

En 2009 se pusieron en marcha 1.391 empresas de textil, confección y calzado, de las cuales en 2014 continuaban activas 532, un 61,7% menos. Aunque, en el conjunto de la economía española, la tendencia general es que sea en el primer año de vida donde se produzcan los mayores descensos de unidades empresariales, el cénit en destrucción de empresas en el sector de la moda fue 2012, cuando desaparecieron un 20% de las compañías que habían echado a andar tres años antes.

En su primer año de vida desistieron 258 compañías, 155 de ellas pertenecientes a la industria de la confección. Un año después, en 2011, la caída se moderó, con la destrucción de 189 empresas, hasta 944 compañías.

Otras 191 empresas perecieron en 2012 y 132 más en 2013, dejando la cifra de supervivientes en 621, un 44,6% de todas las nacidas en 2009. Por último, en 2014, la caída frenó de nuevo, con un descenso del 14,3% respecto al año anterior, hasta 532 empresas. En el camino quedaron 859 compañías según datos hechos públicos ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

La mayoría de ellas pertenecen al sector de la confección que, sin embargo, continúa siendo el mayor empleador de la industria de la moda, el que tiene un mayor tejido empresarial y el que concentra el grueso de las escasas grandes compañías del sector.

En 2009 nacieron 711 empresas dedicadas a la confección, de las que sólo han sobrevivido 223 compañías. La confección fue también el subsector que sufrió el mayor frenazo en la producción industrial. El Índice de Producción Industrial (IPI) del ector se contrajo cada año desde 2006, salvo en 2013, llegando a registrar descensos del 19,7% en 2009.

Por su parte, la industria textil tiene la tasa de supervivencia más elevada de la industria de la moda: de 387 compañías puestas en marcha en 2009, 183 permanecían todavía activas en 2014, un 47,3%. El IPI del textil también retrocedió durante la crisis, especialmente en 2008 (con una caída del 16,9%) y 2009 (cuando el descenso fue del 20,9%). En los años posteriores moderó su caída y fue el que se recuperó más rápido, con subidas en 2013 y 2014.

Por último, el calzado fue la industria que menos empresas perdió en términos absolutos: si en 2009 se crearon 293 empresas en el sector, 126 de ellas continuaban todavía activas cinco años después, lo que supone la destrucción de 167 empresas (frente a las 204 que perecieron en el textil o las 488 de la confección). La producción del calzado evolucionó de manera muy desigual durante la crisis, con caídas del 20,2% pero una pronta recuperación al año siguiente, con ascenso del 2,1% en 20010 y del 3% en 2011, para volver a descender de nuevo en 2012 y 2013.

En el conjunto de la economía española,  más de la mitad de las compañías nacidas en 2009 también han cejado su actividad en los últimos cuatro años. El primer año de vida es donde se producen los mayores descensos de unidades empresariales, con tasas de supervivencia del 79,9% o inferiores.

En el caso de las empresas fundadas en 2009, el 20,1% desparecieron al cabo de un año, el 14,7%, al cabo de dos y el 11,5% perecieron en su tercer año de vida, dejando el acumulado en un 46,2%.