Entorno

Camboya trata de calmar los ánimos con la promesa de aumentar el salario cada año a partir de 2015

Modaes

17 jun 2014 - 15:32

Camboya trata de reconducir el clima de protesta por el aumento salarial. El grupo de trabajo encargado de determinar el salario mínimo nacional para la industria de la confección, el comité asesor de trabajo (LAC, en sus siglas en inglés), ha alcanzado un acuerdo para aumentar el sueldo cada año a partir del 1 de enero de 2015.

 

El consenso se alcanzó ayer durante un encuentro del comité, al que también acudieron representantes del Ministerio de Trabajo del país, de los sindicatos y de la patronal de la industria de la confección de Camboya. Todos los presentes acordaron reunirse el último trimestre del año para concretar cuál será el incremento salarial del próximo ejercicio, según The Phnom Penh Post.

 

Esta es la primera vez en el país asiático que se toma una decisión de este tipo. Hasta ahora, ésta era una cuestión interna del Gobierno, que determinaba el comité asesor de trabajo a intervalos de tiempo irregulares y sin utilizar ningún tipo de fórmula en particular. Sin embargo, todavía no se ha decidido cuál será la nueva fórmula para el cálculo de los futuros incrementos.

 

Camboya da este primer paso después de las presiones internacionales para que atendiese a las peticiones de los obreros del país. En menos de seis meses, el Ejecutivo del país se ha mantenido dos reuniones con compañías internacionales de moda y representantes sindicales. Grupos como Gap, H&M, Levi Strauss, Inditex o Puma, han seguido de cerca la evolución de las negociaciones por la mejora salarial.

 

Las empresas distribuidoras de moda tomaron cartas en el asunto después del incidente que tuvo lugar el pasado 3 de enero, cuando una manifestación en la que los trabajadores del textil reclamaban un incremento salarial acabó en una confrontación violenta después de que las fuerzas de seguridad abrieran fuego contra los trabajadores que formaban parte de la marcha.

 

La industria camboyana de la confección, que emplea a más de 500.000 trabajadores y genera más de 5.000 millones de dólares en exportaciones, ha protagonizado diferentes manifestaciones en contra del aumento de salario que aprobó el Gobierno del país a finales de 2013 y que los trabajadores consideran insuficiente.