Entorno

Astaná, la ciudad de la estepa asiática que crece al calor del petróleo

El fuerte desarrollo de la capital de Kazajistán en los últimos años la ha convertido en un destino atractivo para la moda, sobre todo gracias a la proliferación de centros comerciales de lujo.

María Bertero

16 ene 2018 - 04:25

Astaná, la ciudad de la estepa asiática que crece al calor del petróleo

 

 

La capital de Kazajistán, título que ostenta desde 1998, ha crecido al ritmo del precio del petróleo. Monumentales edificios y centros comerciales de lujo se suceden en Astaná, la ciudad que emergió en la estepa asiática con inversiones provenientes de los combustibles fósiles. Nursultán Nazarbáyev, presidente de Kazajistán desde 1991, tiene como objetivo hacer de Astaná la capital de Asia Central.

 

 

Nueva capital en la estepa de Asia Central

Astaná se convirtió en la capital de Kazajistán en 1998, robándole el título a Altamy. La capital kazaja se reparte entre las dos orillas del rió Ishim: a la derecha se sitúa la parte antigua de Astaná, mientras que a la izquierda se alzan edificios modernos y la sede del Gobierno. 

 

De la ruta de la seda a la Expo Mundial

Situada en la parte norte de la ruta de la seda, Astaná fue la sede de la Expo Mundial en 2017. Bajo el lema Energía del futuro, el evento se centró en soluciones energéticas innovadoras, de las que se jacta Astaná por la concentración de petróleo.

 

Rascacielos de valor energético

El skyline de Astaná es comparable al de Dubái o Las Vegas. La arquitectura de la capital kazaja ha sido financiada gracias a la riqueza energética del país. Uno de los edificios más emblemáticos es la torre de Bayterek, que simboliza el estatus de Astaná como nueva capital.

 

Lujo, distribución y entretenimiento

El centro comercial Khan Shatyr es uno de los más emblemáticos de la ciudad. Más allá de albergar marcas de moda como Armani, Levi’s o seis cadenas de Inditex, el complejo es la carpa más grande del mundo y cuenta con un parque de atracciones y una playa artificial. 

 

La utopía de Nursultán Nazarbáyev

El presidente de Kazajistán fue el responsable de que la capital kazaja se trasladara a Astaná. En el poder desde 1991 gracias a un decreto que le permite presentarse a elecciones de forma continua, Nazarbáyev cuenta con una fortuna estimada de 750 millones de euros.